La enfermedad fibroquística de los senos, comúnmente llamada senos fibroquísticos o cambio fibroquístico, es una condición benigna (no cancerosa) en la cual los senos se sienten grumosos. Los senos fibroquísticos no son dañinos ni peligrosos, pero pueden ser molestos o incómodos para algunas mujeres.
Según la Clínica Mayo, más de la mitad de las mujeres desarrollarán enfermedad mamaria fibroquística en algún momento de sus vidas. Muchas mujeres con senos fibroquísticos no tendrán ningún síntoma asociado.
Aunque no es dañino tener mamas fibroquísticas, esta afección puede dificultar la detección del cáncer de mama.
Si tiene enfermedad mamaria fibroquística, puede experimentar los siguientes síntomas:
Es posible que tenga más hinchazón o bultos en un seno que en el otro. Es probable que sus síntomas empeoren justo antes de su período debido a cambios hormonales, pero puede tener síntomas durante todo el mes.
Los bultos en los senos fibroquísticos tienden a fluctuar en tamaño a lo largo del mes y generalmente son móviles. Pero a veces, si hay una gran cantidad de tejido fibroso, los bultos pueden estar más fijos en un solo lugar.
También puede experimentar dolor debajo de sus brazos. Algunas mujeres tienen una secreción verde o marrón oscuro de sus pezones.
Consulte a su médico de inmediato si sale de su pezón un líquido claro, rojo o con sangre, ya que esto puede ser un signo de cáncer de mama.
Su tejido mamario cambia en respuesta a las hormonas producidas por los ovarios. Si tiene mamas fibroquísticas, es posible que tenga cambios más pronunciados en respuesta a estas hormonas. Esto puede resultar en hinchazón y bultos en los senos dolorosos o dolorosos.
Los síntomas son más comunes justo antes o durante su período. Usted puede desarrollar bultos en sus senos causados por quistes e hinchazón de los lóbulos de sus senos, las glándulas productoras de leche. También puede sentir un engrosamiento protuberante en el seno causado por un crecimiento excesivo de tejido fibroso.
Cualquier mujer puede contraer una enfermedad mamaria fibroquística, pero ocurre con más frecuencia en mujeres entre los 30 y los 50 años.
Las píldoras anticonceptivas pueden reducir sus síntomas y la terapia hormonal puede aumentarlos. Los síntomas típicamente mejoran o se resuelven después de la menopausia.
La enfermedad fibroquística de los senos no aumenta su riesgo de contraer cáncer, pero los cambios en sus senos pueden hacer que sea más difícil para usted o su médico identificar bultos potencialmente cancerosos durante los exámenes mamarios y en las mamografías.
El Grupo de Trabajo de Servicios Preventivos de los Estados Unidos recomienda que las mujeres entre 50 y 74 años de edad se realicen una mamografía cada dos años. El Instituto Nacional del Cáncer (NCI, por sus siglas en inglés) también señala que los autoexámenes regulares de los senos pueden ser útiles.
Es importante que se familiarice con cómo se ven y se sienten sus senos normalmente para que sepa cuándo hay cambios o si algo no parece correcto.
Su médico puede diagnosticar la enfermedad fibroquística de las mamas mediante un examen físico de las mamas.
Su médico también puede ordenar una mamografía, ecografía o resonancia magnética para ver mejor los cambios en sus senos. También se puede recomendar una mamografía digital para las mujeres con senos fibroquísticos, ya que esta tecnología permite obtener imágenes de senos más precisas.
En algunos casos, una ecografía puede ayudar a distinguir el tejido mamario normal de las anomalías. Si a su médico le preocupa la aparición de un quiste u otro hallazgo en su seno, puede ordenar una biopsia para ver si es cancerosa.
Esta biopsia se realiza generalmente por aspiración con aguja fina. Este es un procedimiento quirúrgico para extraer el líquido o tejido con una aguja pequeña.
La mayoría de las mujeres que tienen enfermedad mamaria fibroquística no requieren tratamiento invasivo. El tratamiento domiciliario suele ser suficiente para aliviar el dolor y las molestias asociadas.
Los analgésicos de venta libre como el ibuprofeno (Advil) y el paracetamol (Tylenol) generalmente pueden aliviar eficazmente cualquier dolor y malestar. También puede intentar usar un sostén bien ajustado y de apoyo para reducir el dolor y la sensibilidad en los senos.
Algunas mujeres encuentran que la aplicación de compresas calientes o frías alivia sus síntomas. Intente aplicar un paño caliente o hielo envuelto en un paño en los senos para ver cuál funciona mejor para usted.
Algunas personas han descubierto que limitar el consumo de cafeína, consumir una dieta baja en grasas o tomar suplementos de ácidos grasos esenciales reducirá los síntomas de la enfermedad fibroquística de la mama.
Sin embargo, no hay estudios controlados aleatorios que muestren que estos o cualquier cambio en la dieta son efectivos para aliviar los síntomas.
Llame a su médico si experimenta alguno de los siguientes síntomas. Pueden ser signos de cáncer de mama:
La causa específica de la enfermedad mamaria fibroquística no se entiende completamente. Sin embargo, los médicos sospechan que el estrógeno y otras hormonas reproductivas desempeñan un papel.
Como resultado, es probable que sus síntomas desaparezcan una vez que llegue a la menopausia, ya que la fluctuación y la producción de estas hormonas disminuye y se estabiliza.