10 cosas que he aprendido como mujer que vive con espondilitis anquilosante

Cuando escuché las palabras? Espondilitis anquilosante? Hace cinco años, sentí alivio. Después de siete años de dolor y demasiadas visitas al médico para contar, tuve un diagnóstico. Al mismo tiempo, sin embargo, temía los efectos que tendría una enfermedad crónica grave en mi vida. Poco sabía que la espondilitis anquilosante (AS) me enseñaría mucho sobre la vida, yo mismo y mi propósito.

Estas son las 10 cosas que he aprendido como mujer que vive con EA.

1. Todos están luchando con algo.

Las enfermedades crónicas pueden ser invisibles para la persona promedio. Alguien puede parecer saludable por fuera, pero por dentro está luchando contra el dolor, la desesperanza y el miedo. La apariencia externa de una persona no cuenta su historia completa. La mayoría de nosotros estamos luchando contra algo. Esta enfermedad me ha enseñado a ser más paciente, comprensivo y comprensivo con los demás.

2. Está bien si la familia y los amigos no entienden completamente por lo que estás pasando

A veces, puede parecer que las personas más cercanas a usted no lo apoyan. En realidad, simplemente no entienden lo que es vivir con una enfermedad crónica. No los culpe por eso. Acepta su amor y apoyo. Ellos están haciendo todo lo posible para demostrar que les importa.

3. La conexión con los demás es crítica.

En solo unos pocos años, el alcance de varias comunidades autoinmunes en Facebook e Instagram ha crecido exponencialmente. Estas plataformas corren desenfrenadas con grupos de apoyo e historias curativas. Encontrar a alguien con quien relacionarse puede ayudarlo a sentirse menos solo. Para conectarse con otros en las redes sociales, busque hashtags como #AS #ankylosingspondylitis #autoimmunedisease #autoimmuneprotocol.

4. Busque el apoyo de otros que se alineen con su sistema de creencias

Encuentra personas y grupos de apoyo que se alineen con tu ideología. Compare y pruebe algunos antes de comenzar a invertir su energía y tiempo. Algunos grupos de apoyo pueden tener un efecto negativo en ti y hacerte caer. Involúcrate con personas de ideas afines que te motivan y te elevan.

5. Comparte tu historia

Puede tener miedo de compartir su historia con otros. Sin embargo, puede ser curativo, tanto para usted como para la persona a la que se está abriendo. Hace diez años, habría dado cualquier cosa por encontrar a otras personas que viven con esta enfermedad que estuvieran dispuestas a contar sus historias. Cuando no pude encontrar a nadie, comencé a contar mi propia historia. Desde entonces, he recibido tantos correos electrónicos de agradecimiento de personas que han leído mi historia. Dijeron que les ofrecía esperanza. Compartir su historia también puede ayudarlo a construir su sistema de apoyo y crear conciencia sobre el AS.

6. Confía en tu intuición.

Te conoces mejor que nadie. Si algo no se siente bien, no lo ignore. Estás a cargo de tu cuerpo y plan de tratamiento. Tiene derecho a hacer preguntas sobre la atención que recibe. Todos somos únicos, y nuestro enfoque hacia la salud también debería serlo. Haga su investigación, haga preguntas y escuche a su instinto.

7. Honra tu cuerpo

Es fácil enojarnos con nuestros cuerpos, especialmente cuando tenemos dolor.

Alimente su cuerpo comiendo alimentos no procesados, ricos en nutrientes y haciendo ejercicio a un nivel que funcione para usted. Nuestros cuerpos son máquinas increíbles. Cuando los respetamos, pueden hacer grandes cosas.

8. El autocuidado no es egoísta

Como mujeres, tendemos a extendernos demasiado. A menudo ponemos a los demás primero. Conozca su límite, y sepa que está bien descansar y pedir ayuda. Para estar ahí para nuestros seres queridos, debemos cuidarnos a nosotros mismos.

9. estar agradecido

Puede sonar loco, pero estoy agradecido por mi diagnóstico de EA. Ha enriquecido mi vida, y siempre estoy agradecida. Honrar tus luchas puede ser difícil, pero hay mucho que aprender si estás abierto y agradecido. Practicar la gratitud todos los días destaca lo bueno de nuestras vidas. Puede parecer desafiante, pero cuanto más practiques, más fácil se vuelve.

10. No eres una estadística.

Las estadísticas no son tu realidad. Todavía puedes perseguir tus sueños y alcanzar tus metas. Su AS no lo define a usted (aunque a veces puede sentirse agotador). No olvides todas las partes que te hacen quien eres.

La comida para llevar

La enfermedad crónica puede ser nuestro mejor maestro si nos abrimos a esta idea. Cuando la vida lanza un obstáculo en nuestro camino, tenemos la opción de luchar o honrarlo. Si cambia de perspectiva y se da cuenta de que todavía tiene el control de su vida, puede disfrutar de una calidad de vida más allá de lo que imagina.


Katie Faison es madre, diseñadora y entrenadora certificada en nutrición transformacional. Ella tiene una pasión por la salud, el bienestar y la vida no tóxica. A través de su propia lucha y curación de la espondilitis anquilosante y la iritis crónica, comenzó su blog como una forma de compartir su historia y ayudar a otros. Visite su sitio web, wholelovelylife.com, y seguirla en Instagram.