El síndrome de compresión nerviosa ocurre cuando se comprime o se comprime un nervio. Por lo general, se produce en una sola ubicación. Los nervios en el torso, extremidades y extremidades pueden verse afectados. Los síntomas comunes incluyen dolor, entumecimiento y debilidad muscular en el sitio del nervio.
Los síndromes de compresión nerviosa a menudo son causados por lesiones repetitivas. Las condiciones médicas como la artritis reumatoide, la diabetes o el hipotiroidismo también pueden desempeñar un papel.
El síndrome de compresión nerviosa también se conoce como:
Hay varios tipos diferentes de síndromes de compresión nerviosa. Cada una afecta a un nervio periférico diferente. Los siguientes son algunos de los tipos más comunes de síndromes de compresión nerviosa:
El síndrome del túnel carpiano es el tipo más común de síndrome de compresión nerviosa. Ocurre cuando el nervio mediano se comprime en la muñeca. El nervio mediano se extiende desde la parte superior del brazo hasta el pulgar. En la muñeca, pasa a través de una estructura llamada túnel carpiano. El exceso de presión en la muñeca puede causar hinchazón, lo que puede llevar al síndrome del túnel carpiano.
El síndrome del túnel cubital es el segundo tipo más común de síndrome de compresión nerviosa. También conocida como neuropatía cubital o atrapamiento del nervio cubital en el codo, ocurre cuando el nervio cubital se comprime en el codo. El nervio cubital es el responsable de la sensación que obtienes cuando golpeas tu hueso gracioso. Pasa cerca de la piel del codo. Poner demasiada presión en el codo puede causar hinchazón, lo que puede llevar al síndrome del túnel cubital.
Nervio el síndrome de compresión es más probable que ocurra en sitios donde los nervios pasan a través de estructuras similares a túneles. Los siguientes son algunos tipos más raros de síndrome de compresión nerviosa:
El síndrome de compresión nerviosa a menudo es causado por lesiones repetitivas. Estas lesiones pueden ocurrir en el lugar de trabajo debido a movimientos repetidos relacionados con sus obligaciones laborales. Por ejemplo, una extensión excesiva de la muñeca al teclear en un teclado, usar un mouse o tocar el piano puede provocar el síndrome del túnel carpiano.
Accidentes como esguinces, fracturas y fracturas de huesos también pueden causar el síndrome de compresión nerviosa.
Además, ciertas afecciones médicas pueden desencadenar o hacerte más susceptible a los síndromes de compresión nerviosa. Éstos incluyen:
Las lesiones repetitivas, accidentes y condiciones médicas pueden llevar a:
Todos estos cambios tienen un impacto negativo en la capacidad del nervio para enviar y recibir mensajes. Esto puede causar síntomas como dolor, entumecimiento y función reducida.
Los siguientes son algunos de los factores de riesgo más comunes para el síndrome de compresión nerviosa:
Los síntomas varían según el tipo de síndrome de compresión nerviosa y la ubicación. Tienden a ocurrir en el sitio de la compresión, y algunas veces en áreas y estructuras circundantes.
Algunos síntomas comunes incluyen:
Un médico evaluará sus síntomas. Luego, el médico puede usar un examen físico y pruebas de diagnóstico para identificar el síndrome de compresión nerviosa.
Algunas pruebas utilizadas para diagnosticar formas más raras de síndrome de compresión nerviosa incluyen:
Para el túnel carpiano y el síndrome del túnel cubital, las pruebas de diagnóstico no siempre son necesarias. Aún así, pueden proporcionar información útil sobre la ubicación y la gravedad de la compresión.
El tratamiento para el síndrome de compresión nerviosa a menudo comienza con cambios en el estilo de vida y terapias no invasivas. El tratamiento de una afección subyacente que causa el síndrome de compresión nerviosa también puede aliviar los síntomas. En casos severos, el síndrome de compresión nerviosa puede requerir cirugía.
Evitar los movimientos que causan dolor, adoptar estrategias ergonómicas en el trabajo y en casa, o cambiar las tareas laborales puede mejorar los síntomas. Cuando la obesidad es la causa del síndrome de compresión nerviosa, perder peso puede mejorar los síntomas.
Trabajar con un fisioterapeuta puede ayudar a mejorar su flexibilidad, fuerza y rango de movimiento en el área afectada. La fisioterapia también puede ayudar a aliviar los síntomas como el dolor y el adormecimiento.
Un estudio de 2017 sugirió que la terapia física y la cirugía tenían una eficacia similar en el tratamiento del síndrome del túnel carpiano en las mujeres. Sin embargo, se necesita más investigación ya que este estudio no se ha repetido e involucró solo a 100 mujeres.
La medicación puede ayudar a aliviar los síntomas del síndrome de compresión nerviosa, como el dolor y la inflamación. El tipo de medicamento recetado depende de la severidad de los síntomas. Algunos medicamentos comúnmente recetados para controlar los síntomas causados por el síndrome de compresión nerviosa incluyen:
En algunos casos de síndrome de compresión nerviosa, un médico o fisioterapeuta puede recomendar una férula o una abrazadera para ayudarlo a evitar la presión sobre el nervio.
Los procedimientos quirúrgicos generalmente se consideran un último recurso en el tratamiento del síndrome de compresión nerviosa. No todas las personas que tienen síndrome de compresión nerviosa califican para la cirugía.
El procedimiento quirúrgico requerido depende del tipo de síndrome de compresión nerviosa, el grado de compresión y los nervios y estructuras afectados. Cada procedimiento tiene sus riesgos y beneficios. El pronóstico para la cirugía depende de muchos factores, incluido el tiempo que ha tenido síntomas, la gravedad de sus síntomas y cualquier otra afección de salud subyacente que pueda tener. En general, la perspectiva es buena.
Un cirujano puede ayudarlo a comprender si la cirugía para el síndrome de compresión nerviosa es una buena opción para usted.
Los siguientes remedios caseros pueden prevenir o aliviar los síntomas del síndrome de compresión nerviosa:
La perspectiva para el síndrome de compresión nerviosa varía. En casos muy severos, puede causar daño permanente a los nervios o pérdida de la función en el área afectada. Sin embargo, esto es raro.
Debe hacer una cita con su médico si experimenta síntomas de síndrome de compresión nerviosa. Cuando el síndrome de compresión nerviosa se identifica y trata temprano, se pueden hacer mejoras significativas. Muchas personas hacen una recuperación completa.
Es posible que pueda prevenir el síndrome de compresión nerviosa haciendo lo siguiente: