La trombocitopenia inmune, conocida anteriormente como trombocitopenia idiopática (PTI), hace que tenga un recuento plaquetario bajo. Esto puede resultar en un sangrado excesivo dentro y fuera de su cuerpo. El sangrado asociado con la PTI no suele ser mortal, pero puede llevar a complicaciones graves.
Encontrar los tratamientos adecuados puede ayudar a estabilizar y mejorar el recuento de plaquetas y disminuir el riesgo de sangrado interno y externo. Los tratamientos efectivos reducirán los síntomas de la PTI, como moretones y sangrado. También pueden proporcionarle más libertad para disfrutar de las actividades diarias sin preocuparse.
No hay cura para la PTI, por lo que encontrar el tratamiento adecuado es esencial. Es posible que necesite más de un tipo de tratamiento para controlar su ITP. Hable con su médico acerca de las siguientes opciones.
En la PTI, su sistema inmunológico ataca y destruye las plaquetas, viéndolas como tejido extraño. Los bajos niveles de plaquetas en la sangre conducen a sus síntomas y afecciones relacionadas.
Tomar un antagonista del receptor de trombopoyetina puede aumentar el recuento de plaquetas. Ayuda a que su médula ósea produzca más plaquetas para contrarrestar las pérdidas. Los ejemplos incluyen eltrombopag (Promacta) y romiplostim (Nplate).
Estos medicamentos representan un riesgo de efectos secundarios, como:
Durante más de 30 años, los corticosteroides se han utilizado en el tratamiento de la PTI. En muchos casos, siguen siendo una de las primeras opciones de tratamiento. Se pueden administrar por vía oral o por vena.
Los corticosteroides funcionan bloqueando la respuesta inmune del cuerpo. Esta acción se conoce como inmunosupresión y disminuye el número de proteínas dañinas producidas contra las plaquetas.
Este medicamento se administra durante un período de tiempo, luego la dosis se reduce lentamente en el transcurso de semanas. La duración del tratamiento depende de la respuesta del cuerpo. El tratamiento con corticosteroides también se puede combinar con otras terapias.
Los efectos secundarios asociados con los corticosteroides incluyen:
Rituximab (Rituxan) es un anticuerpo, una proteína especializada, que se enlaza con una célula inmunitaria específica en el cuerpo conocida como célula B. Las células B activadas de forma anormal desempeñan un papel en la destrucción de las plaquetas en la PTI. Cuando el rituximab se adhiere a estas células B anormales, las destruye. Esto disminuye el número de células que atacan las plaquetas.
Puede haber efectos secundarios con este medicamento que incluyen:
Su médico puede recetarle infusiones de inmunoglobulina intravenosa (IgIV) si no responde bien a los corticosteroides. Estos también se pueden utilizar con corticosteroides u otros tratamientos.
No está exactamente claro cómo funciona la IgIV en la PTI, pero se sabe que su interacción con el sistema inmunológico aumenta el número de plaquetas. La IgIV puede usarse antes de la cirugía o en otros casos cuando necesite aumentar su recuento de plaquetas de inmediato.
La IgIV ayuda a prevenir el sangrado o trata el sangrado potencialmente mortal cuando el recuento de plaquetas es especialmente bajo. Los efectos de una infusión ocurren rápidamente y duran hasta cuatro semanas. Durante ese tiempo, puede experimentar efectos secundarios como:
Otro tipo de terapia de inmunoglobulina se conoce como tratamiento anti-D o inmunoglobulina anti-Rh. Esta es una opción para las personas con ITP que tienen un tipo de sangre Rh positivo.
Las proteínas inmunitarias en este tratamiento se producen a partir de donantes de sangre Rh positivos seleccionados y seleccionados. Al igual que la terapia con IgIV, el tratamiento anti-D es más efectivo para elevar rápidamente los recuentos de plaquetas extremadamente bajos para prevenir complicaciones. También se puede usar en personas que no mejoran después de la extracción de su bazo.
Los efectos secundarios de este tratamiento pueden incluir:
Algunos suplementos a base de hierbas y medicamentos de venta libre (OTC) y recetados pueden afectar su recuento de plaquetas haciendo que sangre más fácilmente. Éstos incluyen:
Dependiendo de la gravedad de la PTI, su médico podría recomendarle que deje de tomar estos medicamentos. En algunos casos, el cese de estos medicamentos y suplementos es suficiente para controlar el sangrado sin ningún tratamiento adicional de PTI.
Sin embargo, nunca deje de tomar ningún medicamento sin la aprobación de su médico.
Cuando los medicamentos no funcionan, su médico puede recomendar la extirpación del bazo o la esplenectomía. Los médicos generalmente realizan este procedimiento en adultos que no han respondido a otras opciones de tratamiento. La extracción del bazo puede ayudar a evitar que su cuerpo ataque y destruya las plaquetas para que su nivel de plaquetas pueda normalizarse.
Sin embargo, una esplenectomía no es para todas las personas con PTI. Es efectivo alrededor del 65 al 70 por ciento del tiempo. La extracción del bazo también lo pone en riesgo de contraer ciertas infecciones bacterianas.
La PTI puede aumentar el riesgo de infección, especialmente si se ha realizado una esplenectomía. Algunos síntomas que podrían indicar una infección incluyen:
Si desarrolla una infección bacteriana, los antibióticos formarán parte de su plan de tratamiento.
La dieta y el ejercicio pueden hacer que te sientas mejor, siempre y cuando tengas cuidado con tu elección de actividades. Es importante evitar las actividades e interacciones que pueden causar lesiones y aumentar el sangrado.Por ejemplo, su médico puede recomendarle que evite ciertos deportes de contacto. También es importante usar zapatos buenos para evitar resbalones y caídas.
Es probable que su médico le recomiende que no beba alcohol. El consumo de alcohol puede disminuir la producción de plaquetas y glóbulos rojos, lo que puede convertirse en una combinación peligrosa con la PTI.
El tipo agudo y de corta duración de la PTI es más común en los niños y generalmente se resuelve dentro de los seis meses. Sin embargo, es más probable que los adultos tengan el tipo de PTI crónica, de por vida, y necesiten un tratamiento continuo. Una combinación de medicamentos y cambios en el estilo de vida puede ayudarlo a administrar la PTI y sentirse mejor.
También es importante comprender los riesgos relacionados y los efectos secundarios de cada tratamiento. Es posible que los efectos secundarios superen cualquier beneficio potencial de su medicamento. Usted y su médico evaluarán cuidadosamente los pros y los contras para ayudarlo a encontrar la mejor opción de tratamiento.