Actualmente, el tratamiento para el síndrome del intestino irritable con estreñimiento (IBS-C) se enfoca en tratar los síntomas, prevenir los brotes y evitar los desencadenantes. Los ajustes de estilo de vida son comunes. Estos cambios incluyen comer más fibra, beber más agua, hacer ejercicio regularmente y eliminar los alimentos problemáticos. Existen muy pocos medicamentos para el SII-C.
El tratamiento para IBS-C no es de talla única. Lo que funciona para usted puede no funcionar para otra persona. Sin embargo, los avances en los tratamientos son buenos para todos. Cada año, investigadores y médicos investigan posibles tratamientos para las personas que viven con este trastorno digestivo común. Muchos de estos son prometedores para el futuro.
La Administración de Drogas y Alimentos de los Estados Unidos (FDA) ha aprobado dos medicamentos para el tratamiento de IBS-C:
En 2008, la FDA aprobó la lubiprostona (Amitiza) para el tratamiento de IBS-C. En ese momento, era el único medicamento aprobado por la FDA para el IBS-C. Lubiprostone aumenta el líquido que secreta su intestino delgado. El líquido extra ayuda a evacuar las heces con mayor facilidad, lo que reduce el riesgo de estreñimiento.
Lubiprostone solo está disponible para mujeres mayores de 18 años. Los hombres y los niños con IBS-C no deben usarlo. Los efectos secundarios incluyen náuseas, dolor abdominal y diarrea.
En 2012, la FDA aprobó linaclotida (Linzess) para el tratamiento de IBS-C. Este medicamento también está aprobado para el tratamiento del estreñimiento idiopático crónico (CIC). Este tipo de estreñimiento ocurre regularmente y no responde a los tratamientos típicos.
La linaclotida ayuda a aliviar los síntomas de IBS-C al estimular movimientos intestinales más frecuentes. También puede aliviar el dolor abdominal. El efecto secundario más común de este medicamento es la diarrea.
Los investigadores y las compañías farmacéuticas están investigando y desarrollando nuevos tratamientos para las personas que viven con IBS-C. Por supuesto, el objetivo final es una cura. Pero hasta ese momento, los nuevos desarrollos son muy prometedores. Algunos de estos desarrollos involucran medicamentos y otros están más enfocados en el estilo de vida. Esto es lo que puede esperar ver en el futuro:
En 2017, la FDA aprobó la plecanatida (Trulance) para el tratamiento de CIC. Actualmente, no está prescrito para personas con IBS-C. Sin embargo, el medicamento es prometedor para estas personas, y el fabricante dice que se está evaluando para ese propósito.
Al igual que la lubiprostona, la plecanatida actúa en el tracto gastrointestinal (GI) superior para estimular el líquido producido por los intestinos. El líquido extra hace que pasar los movimientos intestinales sea más fácil. El líquido extra también puede ayudar a mantener la función GI regular.
Se ha usado una clase de medicamentos llamados moduladores de ácidos biliares para tratar el estreñimiento. La bilis es un líquido producido por el hígado. Después de una comida, su hígado envía más bilis a su estómago e intestinos a través de la vesícula biliar. Los investigadores descubrieron que este medicamento podría mover los alimentos y los desechos a través de su IG más rápidamente. Este tipo de medicamento podría alterar el nivel de bilis en su tracto gastrointestinal, y eso podría ayudar a estimular sus intestinos si está estreñido.
Sus intestinos están llenos de billones de bacterias y microorganismos. El balance de? Bueno? Las bacterias pueden jugar un papel en su salud en general. Los probióticos son buenas bacterias. Las investigaciones sugieren que tener un equilibrio saludable de probióticos en su intestino puede aliviar los síntomas del SII, incluidos el dolor y el gas.
La formación y el mantenimiento de bacterias saludables en su cuerpo pueden ayudar a mejorar los síntomas de IBS-C. Puede aumentar su suministro de probióticos comiendo alimentos que contengan esta buena bacteria o tomando suplementos.
Actualmente, los estudios existentes son limitados, pero el futuro es muy prometedor para comprender la relación entre las bacterias y la salud intestinal.
Comer más probióticos es saludable por muchas razones, pero un enfoque bacteriano dirigido puede ser más exitoso. La investigación sugiere que un cóctel de bacterias altamente específicas puede ayudar a alterar cualquier desequilibrio bacteriano en su tracto gastrointestinal y reducir o eliminar los síntomas.
Las bacterias saludables pueden desempeñar otro papel en el tratamiento del SII-C. Esta vez, el tratamiento involucra lo que sale de su cuerpo, en lugar de lo que entra. Los estudios son limitados, pero las investigaciones sugieren que un trasplante fecal puede transferir bacterias saludables del tracto GI de una persona a otra. El objetivo es ayudar a las bacterias buenas a colonizar en los intestinos para que los síntomas de la enfermedad gastrointestinal se reduzcan o eliminen.
Hable con su médico sobre estos y otros tratamientos que podrían serle prometedores. Algunos de estos son años de estar disponibles, pero otros podrían estar a la vuelta de la esquina.
Asegúrese de mantener citas regulares con su médico para mantenerse al tanto de nuevas ideas, nuevos medicamentos y nuevas opciones de tratamiento. Informe a su médico que le gustaría considerar algo diferente si pudiera ser un buen candidato para ello.