La diuresis es una condición en la cual los riñones filtran demasiado líquido corporal. Eso aumenta la producción de orina y la frecuencia con la que necesita usar el baño.
La mayoría de los adultos orinarán de cuatro a seis veces al día, con un rendimiento promedio de entre 3 tazas y 3 litros de orina. Las personas con diuresis orinan con mayor frecuencia, a pesar de que su ingesta de líquidos no haya cambiado.
La diuresis puede ser causada por varias condiciones y medicamentos. Siga leyendo para obtener más información sobre las causas de la diuresis y cuándo debe hablar con su médico.
La diuresis puede ser causada por ciertas afecciones médicas o por tomar medicamentos que aumentan la producción de orina. Los factores de estilo de vida también pueden conducir a esta condición.
La diabetes no controlada hace que el exceso de glucosa (azúcar) circule en el torrente sanguíneo. Cuando esta glucosa llega a los riñones para filtrarse, puede acumularse y bloquear la reabsorción de agua. Eso puede llevar a un aumento en la producción de orina. La diabetes también puede aumentar la sed, lo que puede hacer que beba más.
Los diuréticos, también llamados píldoras de agua, son medicamentos que ayudan al cuerpo a expulsar el exceso de líquido. Por lo general, se prescriben para afecciones como insuficiencia cardíaca, enfermedad renal crónica y presión arterial alta.
Los diuréticos señalan a los riñones para excretar más agua y sodio. Eso reduce la hinchazón y permite que la sangre fluya más libremente por todo el cuerpo.
Hipercalcemia Es una condición en la que circula demasiado calcio por todo el cuerpo. Es comúnmente causado por las glándulas tiroides hiperactivas. Los riñones pueden aumentar la producción de orina para equilibrar los niveles de calcio.
Algunos alimentos y bebidas, como las hierbas como el perejil y el diente de león, y el té verde y negro, son diuréticos naturales. Las bebidas con cafeína y los alimentos excesivamente salados también pueden aumentar la producción de orina.
Si está expuesto a temperaturas frías con frecuencia, puede notar que con frecuencia tiene que orinar. La micción frecuente puede aumentar su riesgo de diuresis.
En temperaturas frías, el cuerpo contrae los vasos sanguíneos, lo que aumenta la presión arterial. En respuesta a eso, los riñones intentarán eliminar el líquido para reducir la presión arterial. Esto se conoce como diuresis de inmersión.
Los síntomas de la diuresis van más allá de la micción frecuente. También pueden incluir:
No hay prueba de detección para la diuresis. Su médico hará el diagnóstico basado en sus síntomas. También examinarán las condiciones médicas subyacentes que pueden causar un aumento de la micción.
Antes de su cita, haga una lista de lo que ha estado comiendo y bebiendo, así como los medicamentos que toma. También debe tomar nota de la frecuencia con la que orina.
Para tratar la diuresis, deberá tratar la causa subyacente. Eso puede implicar:
La micción frecuente puede alterar el delicado equilibrio del agua, la sal y otros minerales en el cuerpo. Eso puede llevar a las siguientes condiciones:
La hiponatremia ocurre cuando no hay suficiente sodio en el cuerpo. El uso de diuréticos y la micción frecuente pueden causar esta condición. El sodio es importante porque ayuda a su cuerpo a regular la presión arterial y los niveles de líquidos. También apoya el sistema nervioso.
La hiperpotasemia se produce si tiene demasiado potasio en el cuerpo. La hipopotasemia se refiere a tener muy poco potasio en el cuerpo. Esto puede ser una complicación del uso de diuréticos.
El potasio es importante para la salud del corazón, las contracciones musculares y la digestión.
La micción excesiva de la diuresis puede conducir a la deshidratación. Sin una hidratación adecuada, su cuerpo tendrá dificultades para regular su temperatura. También puede experimentar problemas renales, convulsiones e incluso shock. Lea más sobre los requisitos diarios recomendados de agua.
Consulte a su médico si está experimentando un aumento en la micción o la sed. Las enfermedades subyacentes que causan la diuresis requieren tratamiento médico.
Su médico puede ayudarlo a controlar su micción excesiva con cambios en sus medicamentos y su dieta. Con un control médico cuidadoso, es posible que pueda prevenir la diuresis por completo.