El lupus discoide (lupus eritematoso discoide) es una enfermedad autoinmune crónica que afecta la piel. Recibe su nombre de las lesiones en forma de moneda que produce.
Esta condición causa una erupción grave que tiende a empeorar cuando se expone a la luz solar. La erupción puede aparecer en cualquier parte del cuerpo, pero es probable que la vea en el cuero cabelludo, el cuello, las manos y los pies. Los casos graves pueden provocar cicatrices permanentes, hiperpigmentación y pérdida de cabello.
El lupus discoide no debe confundirse con el lupus sistémico. El lupus sistémico también puede causar una erupción leve, generalmente en la cara, pero también afecta a los órganos internos. Una persona con lupus sistémico también puede tener lesiones discoides. El lupus discoide no afecta los órganos internos, pero la erupción tiende a ser mucho más grave.
La erupción cutánea puede ir desde un parche suave de color rosa hasta una piel que se ve roja y sin color. Esto puede ocurrir en cualquier parte del cuerpo, especialmente en el cuello, las palmas de las manos, las plantas de los pies y el área debajo de los codos. Incluso puede afectar el canal auditivo.
Los síntomas incluyen:
Algunas personas experimentan picazón, aunque ese no suele ser el caso. Los síntomas pueden estallar y luego entrar en remisión. El lupus discoide no afecta la salud en general.
La causa exacta del lupus discoide no está clara. Parece ser una enfermedad autoinmune, que involucra una combinación de factores genéticos y ambientales. No pasa de persona a persona.
Su médico probablemente sospechará de lupus discoide en el examen clínico. Pero generalmente se requiere una biopsia de piel para el diagnóstico. Comenzar el tratamiento de inmediato puede ayudar a prevenir las cicatrices permanentes.
Los esteroides se utilizan para ayudar a reducir la inflamación. Puede aplicar ungüentos o cremas con fuerza de prescripción directamente sobre la piel. O su médico puede administrar una inyección de esteroides directamente en el área afectada. La prednisona oral puede ayudar a aliviar las lesiones al disminuir la producción de anticuerpos y las células inflamatorias. Los esteroides pueden causar adelgazamiento de la piel, por lo que deben usarse con moderación y con supervisión médica.
Las cremas y pomadas tópicas no esteroides, como los inhibidores de la calcineurina como el tacrolimus, también pueden ayudar a reducir la inflamación.
Los medicamentos contra la malaria son otra forma de reducir la inflamación. Estos medicamentos orales incluyen hidroxicloroquina, cloroquina y quinacrina. Tienden a tener efectos secundarios más leves que algunas otras drogas.
Los medicamentos inmunosupresores pueden disminuir la producción de células inflamatorias. Por lo general, se usan en casos graves o si se está tratando de dejar de usar los esteroides orales. Algunos de estos medicamentos son micofenolato mofetilo, azatioprina y metotrexato.
Otras cosas que puedes hacer:
Para cicatrices y cambios de pigmento, el relleno, la tecnología láser y la cirugía plástica pueden ser opciones. Pero esto solo puede determinarse caso por caso. Si estás interesado, tu dermatólogo puede ofrecerte recomendaciones personalizadas.
Los ataques repetidos de lupus discoide pueden dejar cicatrices o decoloración permanente. Los parches en el cuero cabelludo pueden hacer que su cabello se caiga. A medida que el cuero cabelludo se cura, las cicatrices pueden evitar que el cabello vuelva a crecer.
El riesgo de cáncer de piel puede aumentar si tiene lesiones de larga duración en su piel o dentro de sus labios y boca.
Alrededor del cinco por ciento de las personas con lupus discoide desarrollarán lupus sistémico en algún momento. El lupus sistémico también puede afectar sus órganos internos.
Cualquiera puede desarrollar lupus discoide. Es raro en los niños. Las mujeres entre las edades de 20 y 40 años pueden tener un mayor riesgo.
Los factores que pueden empeorarlo incluyen el estrés, la infección y el trauma.
El lupus discoide es una afección crónica e incurable de la piel, pero puede entrar en remisión.
Colabore estrechamente con su dermatólogo para encontrar tratamientos efectivos que ayuden a controlar su afección y disminuya la posibilidad de cicatrices permanentes.