La enfermedad degenerativa del disco (DDD) es una condición en la que uno o más discos en la espalda pierden su fuerza. La enfermedad degenerativa del disco, a pesar del nombre, no es técnicamente una enfermedad. Es una afección progresiva que ocurre con el tiempo por el uso y desgaste o por una lesión.
Los discos en su espalda están ubicados entre las vértebras de la columna vertebral. Actúan como cojines y amortiguadores. Los discos te ayudan a pararte derecho. Y también lo ayudan a moverse a través de movimientos cotidianos, como girar y doblarse.
Con el tiempo, la DDD puede empeorar. Puede causar un dolor leve a extremo que puede interferir con sus actividades diarias.
Algunos de los síntomas más comunes de la DDD incluyen dolor que:
Las personas con DDD pueden experimentar menos dolor después de caminar y hacer ejercicio. La DDD también puede causar debilitamiento de los músculos de las piernas, así como entumecimiento en los brazos o piernas.
La DDD es causada principalmente por el desgaste de los discos espinales. Con el tiempo, los discos tienden naturalmente a secarse y perder su soporte y función. Esto puede causar dolor y otros síntomas de DDD. DDD puede comenzar a desarrollarse en sus 30 o 40 años, y luego empeorar progresivamente.
Esta condición también puede ser causada por lesiones y uso excesivo, que pueden resultar de deportes o actividades repetitivas. Una vez que un disco está dañado, no puede repararse a sí mismo.
La edad es uno de los mayores factores de riesgo para la DDD. Los discos que se encuentran entre las vértebras se contraen naturalmente y pierden su soporte cómodo a medida que envejece. Casi todos los adultos mayores de 60 años tienen algún tipo de degeneración del disco. No todos los casos causan dolor.
También puede tener un mayor riesgo de desarrollar DDD si tiene una lesión significativa en la espalda. Las actividades repetitivas a largo plazo que ejercen presión sobre ciertos discos también pueden aumentar su riesgo.
Otros factores de riesgo incluyen:
?¿Guerrero de fin de semana? El ejercicio también puede aumentar su riesgo. En su lugar, apunta a un ejercicio diario moderado para ayudar a fortalecer tu espalda sin poner una tensión excesiva en la columna vertebral y los discos. También hay otros ejercicios de fortalecimiento para la espalda baja.
Una resonancia magnética puede ayudar a detectar DDD. Su médico puede ordenar este tipo de prueba de imágenes basándose en un examen físico, así como en una investigación de sus síntomas generales e historial de salud. Las pruebas de imagen pueden mostrar discos dañados y ayudar a descartar otras causas de su dolor.
Los tratamientos de DDD pueden incluir una o más de las siguientes opciones:
Las compresas frías pueden ayudar a disminuir el dolor asociado con un disco dañado, mientras que las bolsas de calor pueden reducir la inflamación que causa el dolor.
El acetaminofeno (Tylenol) puede ayudar a aliviar el dolor de la DDD. El ibuprofeno (Advil) puede minimizar el dolor al mismo tiempo que disminuye la inflamación. Ambos medicamentos pueden causar efectos secundarios cuando se toman con otros medicamentos, así que pregúntele a su médico cuál es el más adecuado para usted.
Cuando los analgésicos de venta libre no funcionan, puede considerar versiones de prescripción. Estas opciones deben usarse con cuidado ya que conllevan el riesgo de dependencia y deben usarse solo en los casos en que el dolor sea intenso.
Su terapeuta lo guiará a través de rutinas que ayudan a fortalecer los músculos de la espalda y al mismo tiempo alivia el dolor. Con el tiempo, es probable que note mejoras en el dolor, la postura y la movilidad en general.
Dependiendo de la gravedad de su condición, su médico puede recomendar un reemplazo de disco artificial o una fusión espinal. Es posible que necesite una cirugía si su dolor no se resuelve o empeora después de seis meses. El reemplazo artificial del disco implica reemplazar el disco roto por uno nuevo hecho de plástico y metal. La fusión espinal, por otro lado, conecta las vértebras afectadas como un medio de fortalecimiento.
El ejercicio puede ayudar a complementar otros tratamientos de DDD al fortalecer los músculos que rodean los discos dañados. También puede aumentar el flujo sanguíneo para ayudar a mejorar la hinchazón dolorosa, al mismo tiempo que aumenta los nutrientes y el oxígeno en el área afectada.
El estiramiento es la primera forma de ejercicio que puede ayudar a DDD. Hacerlo ayuda a despertar la espalda, por lo que puede resultarle útil hacer un poco de estiramiento ligero antes de comenzar el día. También es importante estirarse antes de hacer cualquier tipo de entrenamiento. El yoga es útil para tratar el dolor de espalda y tiene los beneficios adicionales de una mayor flexibilidad y fuerza a través de la práctica regular. Estos estiramientos se pueden hacer en su escritorio para aliviar el dolor de espalda y cuello relacionado con el trabajo.
Las formas avanzadas de DDD pueden conducir a osteoartritis (OA) en la espalda. En esta forma de OA, las vértebras se frotan entre sí porque no quedan discos para amortiguarlas. Esto puede causar dolor y rigidez en la espalda y limitar gravemente los tipos de actividades que puede realizar cómodamente.
El ejercicio es esencial para su salud general, pero especialmente si tiene dolor de espalda asociado con la DDD. Puedes sentirte tentado a acostarte del dolor. La movilidad reducida o la inmovilidad pueden aumentar su riesgo de:
Sin tratamiento ni terapia, la DDD puede progresar y causar más síntomas. Si bien la cirugía es una opción para la DDD, otros tratamientos y terapias menos invasivas pueden ser igual de útiles y a un costo mucho menor. Hable con su médico acerca de todas sus opciones para la DDD.Si bien los discos espinales no se reparan a sí mismos, existen diversos tratamientos que pueden ayudarlo a mantenerse activo y sin dolor.