El cuello uterino es la puerta entre la vagina y el útero. Es la parte inferior de su útero ubicada en la parte superior de su vagina y se parece a una pequeña dona. La abertura en el centro del cuello uterino se llama os.
El cuello uterino funciona como un portero, controlando lo que está y no está permitido a través del sistema operativo.
Cuando no está embarazada, su cuello uterino produce moco, conocido como secreción vaginal. Durante la mayor parte del mes, su cérvix produce una mucosidad espesa que obstruye el orificio nasal, lo que dificulta la entrada de esperma en el útero.
Sin embargo, cuando ovulas, tu cérvix produce un moco delgado y resbaladizo. Su cuello uterino también puede ablandarse o cambiar de posición, y el sistema operativo puede abrirse ligeramente. Todo esto es un esfuerzo calculado para facilitar que el esperma ingrese a su útero.
En los días antes de que comience su período, su cuello uterino puede endurecerse o cambiar de posición. El sistema operativo puede reducirse y prepararse para cerrarse en caso de un embarazo. Si no hay un embarazo, el cuello uterino se relajará y el os se abrirá para permitir que el revestimiento del útero salga de su cuerpo a través de la vagina.
En ocasiones, un cuello uterino cerrado puede ocurrir temporalmente durante parte de cada ciclo menstrual. Otras veces, el cuello uterino siempre parece estar cerrado. Esto se conoce como estenosis cervical. Ocurre cuando el sistema operativo se vuelve inusualmente estrecho o completamente bloqueado. Algunas mujeres nacen con estenosis cervical, pero otras la desarrollan más adelante.
Dependiendo de su edad y de si está o no tratando de quedar embarazada, es posible que no tenga ningún síntoma de cervix cerrado o estenosis cervical.
Si no ha pasado por la menopausia, puede notar que sus períodos se vuelven más irregulares o dolorosos. Un cuello uterino cerrado también puede causar infertilidad porque los espermatozoides no pueden viajar al útero para fertilizar un óvulo.
Si ya ha pasado por la menopausia, es posible que no tenga ningún síntoma. Pero las complicaciones pueden causar dolor abdominal. También puede sentir un bulto en el área pélvica.
Si bien puede nacer con un cuello uterino cerrado, es más probable que se desencadene por otra cosa.
Las posibles causas incluyen:
Para diagnosticar un cuello uterino cerrado, su ginecólogo deberá realizar un examen pélvico con una herramienta llamada espéculo. Insertarán el espéculo en su vagina, permitiéndoles ver su cuello uterino. Examinarán cuidadosamente su tamaño, color y textura. También pueden buscar quistes, pólipos u otros signos de algo inusual.
Si su sistema operativo se ve estrecho o parece anormal, pueden intentar pasar una sonda a través de él. Si no pueden, puede obtener un diagnóstico de estenosis cervical.
El tratamiento para un cuello uterino cerrado depende de varios factores, que incluyen:
Si no planea tener hijos y no tiene ningún síntoma, es probable que no necesite tratamiento.
Pero si está intentando quedar embarazada o tiene síntomas dolorosos, su médico puede recomendar el uso de dilatadores cervicales. Estos son pequeños dispositivos colocados en el cuello uterino. Se expanden lentamente con el tiempo, estirando el cuello uterino.
Tener estenosis cervical puede llevar a varias complicaciones, entre ellas:
Un cuello uterino cerrado también puede conducir a hematometra, que ocurre cuando la sangre menstrual se acumula en el útero. Esto puede causar endometriosis, una condición en la cual el tejido uterino crece en lugares fuera del útero.
La estenosis cervical también puede resultar en una condición llamada piometra. Pyometra es una acumulación de pus dentro del útero. Si esto sucede, sentirá dolor o sensibilidad en su abdomen.
Un cuello uterino cerrado suele ocurrir durante el embarazo, pero también puede suceder si no está embarazada. Hay varias cosas que pueden hacer que esto suceda, por lo que es importante hacer un seguimiento con su médico para averiguar la causa subyacente.