Lo que usted necesita saber sobre los granulomas calcificados

Visión general

Un granuloma calcificado es un tipo específico de inflamación tisular que se ha calcificado con el tiempo. Cuando algo se conoce como? Calcificado? Significa que contiene depósitos del elemento calcio. El calcio tiene una tendencia a acumularse en el tejido que se está curando.

La formación de granulomas es a menudo causada por una infección. Durante una infección, las células inmunitarias rodean y aíslan material extraño, como las bacterias. Los granulomas también pueden ser causados ​​por otro sistema inmunológico o afecciones inflamatorias. Se encuentran más comúnmente en los pulmones. Pero también se pueden encontrar en otros órganos del cuerpo, como el hígado o el bazo.

Granulomas calcificados vs. no calcificados

No todos los granulomas están calcificados. Los granulomas están formados por un grupo de células esféricas que rodean el tejido inflamado. Eventualmente pueden calcificarse con el tiempo. Un granuloma calcificado tiene una densidad similar a la del hueso y aparecerá más brillante que el tejido circundante en una radiografía.

Dado que los granulomas no calcificados no contienen depósitos de calcio, pueden aparecer como un grupo de células menos distintivo en una radiografía o tomografía computarizada. Debido a esto, a menudo se los diagnostica inicialmente como crecimientos cancerosos cuando se los ve de esta manera.

¿Cuales son los sintomas?

Si tiene un granuloma calcificado, es posible que ni siquiera lo sepa o experimente algún síntoma. Por lo general, un granuloma solo causará síntomas si afecta la capacidad de un órgano para funcionar correctamente debido a su tamaño o ubicación.

Si tiene un granuloma calcificado y experimenta síntomas, puede deberse a una afección subyacente en curso que causó la formación del granuloma.

Causas comunes

La formación de granulomas calcificados en los pulmones a menudo se debe a infecciones. Estos pueden ser de una infección bacteriana, como la tuberculosis (TB). Los granulomas calcificados también pueden formarse a partir de infecciones fúngicas como la histoplasmosis o la aspergilosis. Las causas no infecciosas de los granulomas pulmonares incluyen afecciones como la sarcoidosis y la granulomatosis de Wegener.

Los granulomas calcificados también pueden formarse en otros órganos además de los pulmones, como el hígado o el bazo.

Las causas infecciosas más comunes de los granulomas hepáticos son la infección bacteriana con TB y la infección por parásitos esquistosomiasis. Además, la sarcoidosis es la causa no infecciosa más común de los granulomas hepáticos. Ciertos medicamentos también pueden causar que se formen granulomas hepáticos.

Los granulomas calcificados se pueden formar en el bazo debido a la infección bacteriana de la TB o la histoplasmosis de la infección por hongos. La sarcoidosis es una causa no infecciosa de granulomas en el bazo.

Como se diagnostica

Las personas que tienen granulomas calcificados ni siquiera saben que están allí. A menudo se descubren cuando se somete a un procedimiento de imágenes, como una radiografía o una tomografía computarizada.

Si su médico descubre un área de calcificación, puede usar tecnología de imágenes para evaluar el tamaño y el patrón de la calcificación para determinar si se trata de un granuloma. Los granulomas calcificados son casi siempre benignos. Sin embargo, con menos frecuencia, pueden rodearse de un tumor de cáncer.

Su médico también puede realizar pruebas adicionales para determinar qué causó la formación de los granulomas. Por ejemplo, si se descubren granulomas calcificados en su hígado, su médico puede preguntarle sobre su historial médico y de viaje. También pueden realizar pruebas de laboratorio para evaluar su función hepática. Si es necesario, también se puede tomar una biopsia para confirmar una condición subyacente que ha causado la formación de granuloma.

Opciones de tratamiento

Como los granulomas calcificados son casi siempre benignos, generalmente no requieren tratamiento. Sin embargo, si tiene una infección activa o una afección que esté causando la formación de granuloma, su médico trabajará para tratarla.

Si tiene una infección bacteriana o micótica activa, su médico le recetará un antibiótico o antifúngico adecuado. El medicamento antiparasitario praziquantel se puede usar para tratar infecciones parasitarias debidas a la esquistosomiasis.

Las causas no infecciosas de los granulomas, como la sarcoidosis, se tratan con corticosteroides u otros fármacos inmunosupresores para controlar la inflamación.

Posibles complicaciones

A veces la formación de granuloma puede llevar a complicaciones. Las complicaciones de la formación de granuloma a menudo se deben a la condición subyacente que las causó.

El proceso de formación de granuloma a veces puede ser perjudicial para la función del tejido. Por ejemplo, la infección por parásitos esquistosomiasis puede causar que se formen granulomas alrededor de los huevos del parásito en el hígado. El proceso de formación de granulomas puede a su vez conducir a fibrosis del hígado. Esto es cuando el exceso de tejido conectivo se acumula en el tejido cicatricial en el hígado. Esto puede alterar la estructura y función del hígado.

Si tiene una infección activa u otra afección que conduce a la formación de granuloma, es muy importante que se trate para prevenir cualquier complicación.

¿Cuál es la perspectiva?

Si tiene uno o más granulomas calcificados, es probable que no sepa que los tiene. Si se le diagnostica un granuloma calcificado, es probable que el granuloma en sí no requiera tratamiento.

Si tiene una afección subyacente o una infección que conduce a la formación de granuloma, su médico trabajará para tratarla. La perspectiva individual depende de la condición a tratar. Su médico trabajará con usted para establecer un plan de tratamiento y resolver cualquier inquietud.