Los inhibidores de la aromatasa (IA) son medicamentos que se usan en la terapia hormonal para prevenir que la aromatasa, una enzima en el tejido graso, transforme las hormonas en estrógeno.
Este medicamento no evita que los ovarios creen estrógeno. En cambio, las IA ayudan a ralentizar el proceso y disminuir los niveles de estrógeno en los ovarios que ya no producen la hormona. Este es el caso más frecuente en mujeres posmenopáusicas porque los ovarios no producen estrógeno y progesterona después de la menopausia.
Los inhibidores de la aromatasa se pueden usar en la terapia hormonal para tratar los cánceres de mama con receptores hormonales positivos en las mujeres. Esto se debe a que muchos cánceres de mama requieren estrógeno para crecer. Los inhibidores de la aromatasa reducen los niveles de estrógeno y, por lo tanto, pueden disminuir el crecimiento del tumor y tratar el cáncer de mama.
Muchos científicos creen que las IA son más efectivas que el tamoxifeno, un medicamento antiestrógeno que también se usa para tratar el cáncer de mama. El tamoxifeno tiene muchos efectos secundarios que los AI no tienen, como aumentar el riesgo de desarrollar cáncer uterino.
Los científicos también están trabajando para determinar si las IA se pueden usar para reducir el riesgo de cáncer de mama. El uso preventivo de IA aún no está aprobado en los Estados Unidos.
Cuando se le diagnostica cáncer de mama, su médico examinará sus células cancerosas para ver si se han unido a las proteínas de estrógeno o progesterona. Las células mamarias y algunas células cancerosas dependen de estos receptores o proteínas para crecer.
Si se han adherido a una o a estas dos proteínas, su cáncer se denominará:
Si sus células de cáncer de mama dan negativo para cualquiera de las dos hormonas, es poco probable que la terapia hormonal funcione. En este caso, los médicos recomiendan buscar opciones de tratamiento contra el cáncer más tradicionales.
Los inhibidores de la aromatasa solo se recomiendan para mujeres posmenopáusicas. El tamoxifeno se recomienda para hombres, así como para mujeres pre y posmenopáusicas.
La FDA ha aprobado tres formas de inhibidores de la aromatasa recetados. Los medicamentos están disponibles como tabletas orales:
El tratamiento generalmente comienza después del tratamiento inicial para el cáncer, como cirugía, quimioterapia o radiación.
Los inhibidores de la aromatasa pueden tomarse junto con el tamoxifeno, un medicamento similar que impide que el estrógeno se adhiera a los receptores. La terapia hormonal suele durar de 5 a 10 años. Dependiendo de su caso individual, su médico puede recomendar el uso de IA con tamoxifeno.
La mayoría de las investigaciones científicas señalan que las principales ventajas de las IA son que no implican muchos de los efectos secundarios negativos del tamoxifeno. Éstos incluyen:
Si decide realizar la terapia hormonal con aromatasa, tenga en cuenta los posibles efectos secundarios:
También se ha demostrado que la terapia de IA aumenta su riesgo de desarrollar las siguientes afecciones más graves:
El adelgazamiento óseo y la fractura son los riesgos más comunes. Su riesgo aumenta al tomar el medicamento, pero disminuye después de que deje de tomarlo. Un estudio evaluó la pérdida ósea y comparó a las personas que toman IA con un grupo de control:
Este tratamiento no se recomienda para mujeres en la perimenopausia porque los medicamentos inhibidores de la aromatasa no evitan que los ovarios produzcan hormonas de estrógeno que contribuyen al crecimiento del cáncer.
El cáncer de mama es tratable si se detecta temprano y se trata adecuadamente. Si tiene cáncer de mama con receptores hormonales positivos y ya pasó por la menopausia, la terapia con inhibidores de la aromatasa puede ser una opción de tratamiento exitosa para usted. Hable con su médico acerca de cómo puede usar los métodos tradicionales de tratamiento del cáncer y la terapia hormonal para el tratamiento del cáncer de mama.