El estrés, definido como tensión emocional o tensión mental, es un sentimiento demasiado común para muchos de nosotros.
Según la Asociación Americana de Psicología (APA), el nivel de estrés promedio de los adultos en los Estados Unidos en 2015 fue de 5.1 en una escala de 1 a 10.
Demasiado estrés puede producir síntomas tanto físicos como emocionales.
Veamos algunos de los signos emocionales del estrés y lo que puede hacer para reducirlos y controlarlos.
La Asociación de Ansiedad y Depresión de América (ADAA) define la depresión como una enfermedad en la que un individuo experimenta un estado de ánimo severo y persistente.
La investigación sugiere un vínculo entre los altos niveles de estrés y el inicio de la depresión.
Un estudio de más de 800 mujeres investigó la relación entre los diferentes tipos de estrés y la depresión mayor.
Durante el estudio, los investigadores encontraron que los eventos de estrés agudo y crónico contribuyeron a una mayor incidencia de depresión en las mujeres.
Otro estudio observacional examinó los niveles de estrés de la población en edad de trabajar. Se midieron los niveles generales de estrés y los síntomas de los participantes. La depresión fue más común en las personas que reportaron niveles más altos de estrés.
La ansiedad difiere de la depresión. Se caracteriza por sentimientos de temor abrumador, en lugar de sentimientos de tristeza.
Sin embargo, al igual que la depresión, los estudios han sugerido que el estrés puede estar relacionado con la ansiedad y los trastornos de ansiedad.
En un estudio, los investigadores investigaron los efectos de los niveles de estrés en el hogar y el trabajo en los niveles de ansiedad y depresión. Descubrieron que las personas que experimentaban altos niveles de estrés laboral tenían más probabilidades de tener más síntomas de ansiedad y depresión.
La irritabilidad y la ira pueden convertirse en rasgos comunes en personas estresadas.
En un estudio, los niveles más altos de ira se asociaron con el estrés mental y la posibilidad de un ataque cardíaco relacionado con el estrés.
Otro estudio investigó la relación entre la ira, la depresión y los niveles de estrés en los cuidadores. Los investigadores encontraron una asociación entre el estrés crónico relacionado con el cuidado y los niveles de ira.
En algunas personas, el exceso de estrés puede tener un impacto negativo en el deseo sexual y el deseo de ser íntimo.
Un estudio publicado en 2014 encontró que los niveles de estrés crónico tenían un impacto negativo en la excitación sexual. La investigación sugirió que tanto los altos niveles de cortisol como una mayor probabilidad de distraerse conducían a niveles más bajos de excitación.
Gran parte de la investigación relacionada con el estrés y la libido baja involucra a las mujeres, pero ciertamente puede afectar a los hombres también. Un estudio en animales mostró que el estrés social durante la adolescencia afectó el apetito sexual de los hámsters machos durante la edad adulta.
Si tiene problemas con la concentración y la memoria, el estrés puede ser parte del problema.
Un estudio en animales encontró que las ratas adolescentes expuestas a estrés agudo experimentaron más problemas de rendimiento de la memoria que sus homólogos no estresados.
Otra revisión investigó las vías de respuesta al estrés en el cerebro y su efecto en la memoria a largo plazo. Los investigadores descubrieron que ciertas hormonas después de un evento estresante o traumático pueden tener la capacidad de alterar la memoria.
Durante mucho tiempo ha habido un vínculo entre el estrés y las conductas adictivas.
Un documento amplió la idea de que los cambios en el cerebro relacionados con el estrés pueden jugar un papel en el desarrollo de la adicción. Según los investigadores, el estrés crónico puede cambiar la naturaleza física del cerebro para promover conductas que crean hábitos y adicciones.
Otro estudio incluso encontró que en ciertas personas, las variaciones genéticas pueden desempeñar un papel adicional en la respuesta al estrés y la vulnerabilidad hacia la adicción.
Los muchos efectos emocionales del estrés pueden hacer que te sientas como si estuvieras experimentando cambios de humor.
Un estudio de 2014 examinó el papel de varios tipos de pruebas de estrés en fisiología, estado de ánimo y cognición. La investigación demostró que los factores de estrés social y físico pueden tener un gran impacto en el bienestar emocional y el estado de ánimo.
Con los muchos otros signos emocionales del estrés, es fácil ver cuánta influencia puede tener el estrés en su estado de ánimo general.
Hay muchas maneras de mejorar su estado de ánimo, tales como:
Para obtener cambios de humor más serios que no parecen desaparecer, acuda a un profesional de salud mental para obtener ayuda.
La reducción de los síntomas emocionales del estrés comienza con la reducción de las fuentes de estrés en su vida.
El American Institute of Stress explica que si bien hay una variedad de técnicas para reducir el estrés, es importante encontrar algunas que funcionen para usted.
Encontrar las técnicas para reducir el estrés que le funcionen es un paso importante para disminuir los síntomas emocionales del estrés.
Con el tiempo, es posible que su resolución contra el estrés se vuelva más fuerte y que sus síntomas mejoren.
Sin embargo, si se da cuenta de que todavía está luchando para manejar los aspectos emocionales del estrés diario o crónico, puede ser mejor comunicarse con un profesional de salud mental.
Tenga en cuenta que el estrés también puede tener efectos negativos en su salud física. Es importante obtener ayuda para mantenerse en su mejor forma, tanto emocional como físicamente.