La prostatitis no bacteriana crónica, también conocida como síndrome de dolor pélvico crónico, es una condición común que afecta a los hombres. Causa dolor e inflamación en la próstata, la pelvis y el tracto urinario inferior. La glándula prostática se encuentra justo debajo de la vejiga en los hombres. Produce fluido que ayuda a transportar el esperma. En los Estados Unidos, la prostatitis no bacteriana crónica afecta a alrededor del 10 al 15 por ciento de los hombres.
Los síntomas pueden causar dolor continuo, molestias y problemas urinarios, como:
No ignore ninguno de los síntomas de la prostatitis crónica no bacteriana. En su lugar, haga una cita con su médico. Hay una variedad de tratamientos que pueden ayudar.
Los Institutos Nacionales de la Salud (NIH) describen cuatro categorías de prostatitis:
Se desconoce la causa de la prostatitis no bacteriana crónica. Esto hace que sea difícil predecir quién está en riesgo de padecer esta afección. Sin embargo, la investigación sobre la causa está en curso. Una vez que se descubre la causa, los médicos podrán identificar los factores de riesgo y el tratamiento específico.
Su médico revisará su historial médico y es probable que le pida que llene un cuestionario sobre sus síntomas. También realizarán un examen de próstata. Y es probable que soliciten una muestra de orina para detectar una infección.
Durante un examen de próstata, su médico insertará un dedo enguantado y lubricado en su recto. Hacen esto para que puedan sentir una próstata blanda, blanda o inflamada, lo que indica inflamación o infección. Dependiendo de los resultados de su examen, su médico puede realizar lo siguiente:
El objetivo del tratamiento es ayudar a mejorar los síntomas. Tomar antibióticos para tratar esta condición es controvertido.
Algunos médicos no administran antibióticos porque la afección puede ser crónica y no ser causada por una infección activa. Algunos médicos prescriben antibióticos, pensando que podría ayudar a tratar una infección que no se puede identificar fácilmente.
Otros tratamientos comunes incluyen:
Los remedios alternativos y naturales que pueden reducir el dolor continuo incluyen:
Hable con su médico antes de tomar cualquier suplemento de hierbas. Algunas combinaciones de hierbas pueden reducir la efectividad de ciertos medicamentos.
La prostatitis no bacteriana crónica / síndrome de dolor pélvico crónico puede ser una afección continua y dolorosa. El ejercicio y la fisioterapia del suelo pélvico pueden mejorar sus síntomas. Según la Asociación Americana de Urología, tener prostatitis no aumenta su riesgo de cáncer de próstata.
Para enfrentar la ansiedad o la depresión provocada por el dolor crónico y la inflamación, hable con su médico acerca de los tratamientos para mejorar su salud mental. Otros tratamientos pueden incluir medicamentos para la ansiedad y antidepresivos. Unirse a un grupo de apoyo, obtener asesoramiento privado o participar en terapia conductual también puede ayudarlo a sobrellevar la afección.