La enfermedad cardiovascular, también conocida como enfermedad cardíaca, es la principal causa de muerte entre los estadounidenses, y las personas con diabetes tienen dos o cuatro veces más probabilidades de morir a causa de ella.
Hay varias cosas que puede hacer para ayudar a reducir sus probabilidades de desarrollar una enfermedad cardíaca si está viviendo con diabetes. El primer paso es sentarse con su médico y hablar sobre cómo manejar mejor la condición de una manera que disminuya su riesgo. Use la siguiente lista de preguntas en su próxima cita médica como una herramienta para ayudar a iniciar la conversación.
Su médico sabe mejor que nadie qué factores de riesgo específicos podría estar afectando su diabetes. Los principales factores de riesgo para las enfermedades cardíacas relacionadas con la diabetes son la presión arterial alta, el colesterol alto, los niveles desequilibrados de azúcar en la sangre, la obesidad y un estilo de vida sedentario.
Una vez que usted y su médico identifiquen sus principales factores de riesgo para la enfermedad cardíaca, pueden trabajar juntos para crear un plan de acción que ayude a minimizar estos riesgos y mantener su corazón sano.
Si actualmente no está controlando el azúcar en la sangre y la presión arterial en el hogar, es una buena idea hablar con su médico sobre si debe comenzar. Los monitores caseros para el azúcar en sangre y la presión arterial están ampliamente disponibles en farmacias y en línea. También es posible que su proveedor de seguro médico pueda ayudar a cubrir parte del costo.
Hable con su médico sobre los dispositivos que podrían funcionar mejor para usted y establezca un programa de autocomprobación para asegurarse de que está recopilando información de la manera más efectiva posible. Una vez que comience a revisarse en su casa, lleve un diario de sus niveles y llévelo a su próxima cita para que usted y su médico puedan revisarlo juntos.
Uno de los cambios más importantes que las personas con diabetes pueden hacer para reducir su riesgo de enfermedad cardíaca es modificar su dieta. Si su dieta es alta en sodio, grasas trans, grasas saturadas o azúcar, está aumentando significativamente sus posibilidades de desarrollar una enfermedad cardíaca. Incluso si no ha comido tan bien como debería, hable con su médico honestamente sobre su dieta actual y discuta cómo puede elaborar un plan de comidas que lo haga menos susceptible a las enfermedades del corazón.
Mantenerse físicamente activo es otro paso importante que puede tomar para disminuir las probabilidades de desarrollar una enfermedad cardíaca. El ejercicio ayuda a disminuir la presión arterial y normaliza los niveles de azúcar en la sangre, disminuyendo las probabilidades de sufrir un ataque cardíaco o un derrame cerebral.
Pregúntele a su médico qué tipo de actividad física podría adaptarse mejor a sus necesidades personales, y trabaje en conjunto para desarrollar una rutina de ejercicios que lo aliente a levantarse del sofá y ponerse en movimiento. Trate de hacer por lo menos dos horas y media de ejercicio aeróbico de intensidad moderada cada semana. Esto podría ser cualquier cosa, desde dar un paseo rápido hasta trabajar en su jardín.
También es una buena idea consultar con su médico si hay algún ejercicio que deba evitar debido a alguna condición médica existente o restricciones de movilidad que pueda tener.
Los altos niveles de estrés pueden aumentar su riesgo de desarrollar enfermedades del corazón. Si es propenso al estrés o la ansiedad, pídale a su médico que le sugiera algunas técnicas para reducir el estrés que puede usar cuando se sienta tenso. Hay una serie de ejercicios de respiración fáciles que puede practicar para ayudar a reducir el estrés. Su médico también puede recomendar estrategias más avanzadas como la meditación o la relajación muscular progresiva.
Al tomarse unos minutos cada día para eliminar el estrés y relajarse, no solo ayudará a protegerse contra las enfermedades del corazón, sino que también ayudará a fomentar una sensación general de calma y bienestar.
Si actualmente no está tomando medicamentos para la diabetes, vale la pena hablar con su médico sobre si hay alguna que sea adecuada para usted. Para muchas personas con diabetes tipo 2, una dieta saludable y ejercicio regular es la mejor opción. Pero si cree que se beneficiaría con la introducción de medicamentos en su rutina de autocuidado, debe hablar con su médico. Incluso si está considerando tomar suplementos o vitaminas de venta libre, siempre debe consultar a su médico de antemano para asegurarse de que no interfieran con ningún otro tratamiento que esté tomando actualmente.
Es una buena idea estar al tanto de los síntomas relacionados con la enfermedad cardíaca para que pueda actuar de inmediato si cree que está experimentando uno o más de ellos. Pregúntele a su médico qué síntomas debe tener en cuenta y qué significa cada uno de esos síntomas en términos de su salud general. Algunos síntomas comunes de la enfermedad cardíaca incluyen dolor en el pecho, dolor en el brazo izquierdo, dolor en la mandíbula, sudoración excesiva, fatiga y náuseas.
Tenga en cuenta que esta guía de discusión es solo un punto de referencia. Debería sentirse cómodo preguntándole a su médico si su diabetes podría estar afectando su riesgo de enfermedad cardíaca. Recuerda que tu médico no te va a juzgar. Incluso si tiene dudas sobre discutir ciertos temas, ser abierto y honesto con su médico lo ayudará a abordar sus inquietudes de manera adecuada.