Los juanetes (esas protuberancias óseas en la parte interna de su pie, en la articulación de su dedo gordo del pie) pueden ser dolorosos. A menudo son causadas por nuestras elecciones de zapatos, y seguir usando los zapatos equivocados puede hacer que estas proyecciones óseas crezcan más y sean más dolorosas. Una vez que tienes un juanete, tu elección de zapatos se vuelve aún más importante.
La protuberancia se forma cuando los huesos que forman la articulación del dedo gordo del pie se desalinean. Esto puede ser causado por zapatos estrechos o puntiagudos que aprietan los dedos juntos. El juanete puede endurecer el dedo gordo del pie y ejercer presión sobre los otros dedos, lo que puede dificultar la marcha. Eventualmente, la presión puede hacer que los otros dedos de los pies también se doblen.
La protuberancia de un juanete y la nueva forma de sus pies pueden hacer que sus zapatos sean más incómodos. Los zapatos apretados o estrechos serán especialmente dolorosos porque aprietan contra el juanete.
Pregúntele a su médico o podólogo sobre zapatos especiales para personas con juanetes. Usar los zapatos adecuados puede mantener sus pies cómodos y evitar que el juanete empeore.
Si el juanete es pequeño, todo lo que necesita es un zapato cómodo con un dedo del pie espacioso. El zapato debe ser de tacón bajo (menos de 1 o 2 pulgadas), con suficiente espacio para que quepan sus dedos cómodamente. Es posible que tenga que subir un tamaño medio o más para obtener el ajuste correcto.
También es posible que desee comprar un zapato con 1/4 a 1/2 pulgada de profundidad adicional. La profundidad adicional le da a su pie más espacio, que puede acomodar cualquier callos o callos que pueda tener en la parte inferior de su pie. También tendrá espacio para agregar una inserción, que apoya su pie. Si el juanete ha dejado el pie muy deformado, pregúntele a su podólogo acerca de tener zapatos hechos a medida.
En lugar de comprar zapatos nuevos, puede modificar los zapatos que ya tiene. Una zapatería puede usar una camilla para ampliar el área de los dedos de los pies y darle un mejor ajuste. También puede agregar ortesis. Estas inserciones alivian la presión en sus pies y los hacen más cómodos.
En primer lugar, visite a su médico de atención primaria o podólogo. El médico examinará su juanete y le recomendará el zapato correcto.
Debería poder comprar zapatos cómodos y espaciosos en cualquier zapatería. Muchas compañías fabrican zapatos lo suficientemente anchos y suaves para acomodar juanetes, como The Walking Company, Orthofeet y FootSmart. Los zapatos de profundidad adicional están disponibles en tiendas de zapatos especializadas y en línea. Si necesita un zapato a medida, verá a un especialista llamado ortopedista.
Medicare cubrirá el costo de un par de zapatos personalizados, incluido el ajuste, cada año. También pagarán tres pares de inserciones para zapatos de profundidad adicional.
Encontrar el zapato adecuado es importante si tienes juanetes. Siempre elige la función a la moda. El zapato debe tener un frente lo suficientemente ancho como para caber cómodamente en todos los dedos, y una suela suave para amortiguar cada paso.
Compre zapatos hechos de un material elástico, como cuero o lona. Busque zapatos ajustables con cordones o una correa que pueda aflojar para adaptarse a los cambios en el tamaño de sus pies o su juanete con el tiempo.
Evite los zapatos que son puntiagudos, estrechos o ajustados. También debe mantenerse alejado de los tacones que son más altos que 2 pulgadas.
Una vez que tenga los zapatos adecuados, agregue uno o más de los siguientes accesorios para aumentar su comodidad.
Almohadillas de juanete: Coloque una almohadilla de piel de topo, fieltro o relleno de gel sobre el juanete para que actúe como un cojín. La almohadilla evitará que el juanete se frote contra el zapato y se irrite. Puedes comprar almohadillas de juanete en tu farmacia local.
Ortesis: Colocar un inserto dentro de su zapato colocará su pie en una posición más cómoda y aliviará la presión sobre él. Puede comprar productos ortopédicos con una receta médica de su podólogo o sin receta en una farmacia.
Espaciador del dedo del pie: Un espaciador de silicona colocado entre su dedo gordo y el segundo dedo ayudará a mantener sus dedos en la alineación correcta.
Soporte del arco: A menudo las personas con juanetes tienen pies planos y un arco inestable. Su arco es el área curva en la parte inferior de su pie. Los soportes de arco de venta libre pueden ayudar a corregir este problema y poner sus pies en una alineación más natural. Puede comprarlos sin receta o con una receta de su médico.
Calcetines delgados, sueltos: Evite los calcetines gruesos o apretados. Pondrán presión sobre tu juanete y causarán aún más dolor.
Una vez que tenga el zapato correcto, asegúrese de que le quede bien. Un zapato bien ajustado no presiona ni roza contra su juanete.
Si continúas usando zapatos incómodos, el juanete puede crecer. También puede desarrollar una de estas complicaciones:
Una vez que tenga un juanete, no desaparecerá a menos que tenga una cirugía. Evite que crezca cuidando bien sus pies y usando los zapatos adecuados.