Derrame paraneumónico

Visión general

El derrame paraneumónico (EPP) es un tipo de derrame pleural. El derrame pleural es una acumulación de líquido en la cavidad pleural, el espacio delgado entre los pulmones y la cavidad torácica. Siempre hay una pequeña cantidad de líquido en este espacio. Sin embargo, tener demasiado líquido en el espacio pleural puede evitar que los pulmones se expandan completamente y dificultar la respiración.

La acumulación de líquido en el PPE es causada por la neumonía.

¿Cuál es la diferencia entre el derrame paraneumónico y el empiema?

El EPP es una acumulación de líquido en la cavidad pleural. El empiema es una acumulación de pus, un líquido espeso amarillo-blanco formado por bacterias y glóbulos blancos muertos. También es causada por la neumonía.

Puede desarrollar empiema si el EPP no se trata lo suficientemente rápido. Entre el 5 y el 10 por ciento de las personas con EPP tienen empiema.

Tipos de derrame paraneumónico

El PPE se divide en tres tipos según el tipo de líquido que se encuentra en el espacio pleural y cómo debe tratarse:

  • Derrames paraneumónicos no complicados. El líquido puede estar turbio o claro, y no contiene bacterias. El PPE mejorará cuando tome antibióticos para tratar la neumonía.
  • Derrames paraneumónicos complicados. Las bacterias han viajado desde los pulmones hacia el espacio pleural, causando una acumulación de líquido y glóbulos blancos. El fluido está turbio. Tendrá que ser drenado.
  • Empyema thoracis. En el espacio pleural se acumula pus de color amarillo blanquecino. Esto puede suceder si la neumonía no se trata lo suficientemente rápido.

Los síntomas

Los síntomas de PPE incluyen:

  • fiebre
  • tos, a veces con flema
  • fatiga
  • falta de aliento
  • Dolor de pecho

Debido a que estos también son síntomas de neumonía, es posible que el médico deba realizar una radiografía de tórax o una ecografía para determinar con seguridad si tiene EPP.

Causas

El EPP es causado por la infección pulmonar, neumonía. Tanto la neumonía bacteriana como la viral pueden causar EPP, pero las bacterias lo causan con mayor frecuencia.

Cuando tienes una infección, tu sistema inmunológico libera glóbulos blancos para atacar el virus o las bacterias. Los glóbulos blancos pueden dañar los diminutos vasos sanguíneos en los pulmones, causando que el líquido se escape de ellos hacia el espacio pleural. Si el PPE no se trata, los glóbulos blancos y las bacterias pueden acumularse en el líquido y causar empiema.

Entre el 20 y el 57 por ciento de las personas que son hospitalizadas por neumonía cada año en los Estados Unidos desarrollan EPP. Es más probable que tenga EPP si su neumonía no recibe tratamiento durante varios días.

Los adultos mayores y los niños son más vulnerables a contraer EPP por neumonía.

Opciones de tratamiento

El tratamiento de la neumonía bacteriana con antibióticos lo antes posible puede prevenir el EPP y el empiema.

Si no mejora con los antibióticos, o su PPE ha progresado a empiema, es posible que su médico deba drenar el líquido del espacio pleural. Una forma de hacerlo es con un procedimiento llamado toracentesis. El médico insertará una aguja entre dos costillas en su costado. Luego, se usa una jeringa para extraer el líquido del espacio pleural.

Otra opción es colocar un tubo hueco llamado tubo torácico o catéter en su pecho para drenar el líquido.

Si drenar el líquido no funciona, es posible que necesite una cirugía para extraerlo. Las opciones incluyen:

  • Toracoscopia El cirujano hace algunas incisiones pequeñas en el pecho e inserta una pequeña cámara e instrumentos. Este procedimiento se puede usar para diagnosticar el EPP y para eliminar el líquido del espacio pleural.
  • Cirugía torácica asistida por video (VATS). El cirujano inserta una pequeña cámara e instrumentos pequeños a través de unas pequeñas incisiones en la pared torácica. El cirujano puede ver una imagen de sus pulmones en una pantalla de video para extraer el líquido.
  • Toracotomia El cirujano hace una incisión en la pared torácica entre las costillas y extrae el líquido.

panorama

El pronóstico depende de la gravedad de su condición y de la rapidez con la que recibe tratamiento. Tomar antibióticos lo antes posible puede evitar que la neumonía se convierta en PPE y empiema. Las personas con EPP suelen tener una neumonía más grave o avanzada, que puede ser muy grave e incluso potencialmente mortal.

Con tratamiento, la perspectiva es buena. Después de que haya recibido tratamiento, su médico le hará un seguimiento con radiografías de tórax y otras pruebas para asegurarse de que la infección haya desaparecido y que el líquido haya desaparecido.