La neumonía lipoide es una condición rara que ocurre cuando las partículas de grasa ingresan a los pulmones. Los lipoides, también conocidos como lípidos, son moléculas de grasa. La neumonía se refiere a la inflamación de los pulmones. La neumonía lipoidea también se llama neumonía lipídica.
Hay dos tipos de neumonía lipoidea. Neumonía lipoide exógena ocurre cuando las partículas de grasa entran desde fuera del cuerpo y llegan a los pulmones a través de la nariz o la boca.
Con neumonía lipoide endógenaLas partículas de grasa dentro del cuerpo se acumulan en los pulmones, causando inflamación. La neumonía lipoidea endógena también se conoce como neumonía por colesterol, neumonía dorada o, en algunos casos, neumonía lipoidea idiopática.
Los síntomas de la neumonía lipoidea tanto exógena como endógena varían de persona a persona. Muchas personas no experimentan ningún síntoma en absoluto. Otros experimentan síntomas leves.
Los síntomas de la neumonía lipoide tienden a empeorar con el tiempo. En algunos casos, pueden llegar a ser graves o incluso mortales.
Algunos signos y síntomas comunes de la neumonía lipoidea pueden incluir:
Otros síntomas menos comunes de la neumonía lipoidea pueden incluir:
La causa de la neumonía lipoidea depende del tipo de neumonía lipoidea.
La neumonía lipoide exógena ocurre cuando se inhala o se aspira una sustancia grasa. La aspiración ocurre cuando usted traga un sólido o un líquido por la tubería incorrecta. Cuando la materia ingresa a la tráquea en lugar del esófago, puede terminar en los pulmones.
Una vez en los pulmones, la sustancia provoca una reacción inflamatoria. La severidad de la reacción a menudo depende del tipo de aceite y la duración de la exposición. La inflamación severa puede dañar permanentemente los pulmones.
Los laxantes a base de aceite mineral se encuentran entre las sustancias inhaladas o aspiradas más comunes que causan neumonía lipoidea exógena.
Otras sustancias grasas que pueden causar neumonía lipoidea exógena incluyen:
La causa de la neumonía lipoidea endógena es menos clara. A menudo ocurre cuando una vía aérea está bloqueada, a menudo por un tumor pulmonar canceroso. Los bloqueos pueden causar que las células se descompongan y se inflamen, lo que resulta en una acumulación de escombros. Estos residuos pueden incluir colesterol, una grasa que es difícil de descomponer. A medida que el colesterol se acumula, puede desencadenar inflamación.
La afección también puede ser provocada por la inhalación prolongada de polvo y otras sustancias irritantes, ciertas infecciones y problemas genéticos al descomponer las grasas.
Ciertos factores de riesgo pueden aumentar su probabilidad de desarrollar neumonía lipoidea. Estos varían según el tipo de neumonía lipoidea.
Los factores de riesgo para la neumonía lipoidea exógena incluyen:
Los factores de riesgo para la neumonía lipoidea endógena incluyen:
Su médico le realizará un examen físico y le preguntará acerca de sus síntomas.
Los síntomas de la neumonía lipoidea son similares a los de otras afecciones pulmonares, como la neumonía bacteriana, la tuberculosis y el cáncer de pulmón. Como resultado, la neumonía lipoide puede ser difícil de diagnosticar.
La mayoría de los tipos de neumonía son visibles en una radiografía de tórax o una radiografía. Sin embargo, una radiografía de tórax no es suficiente para identificar qué tipo de neumonía tiene.
Debe informar a su médico si recuerda haber inhalado o aspirado una sustancia grasa antes de que aparezcan sus síntomas. Esto puede ayudar a su médico a identificar la neumonía lipoidea exógena. También es importante compartir cualquier hábito de rutina que tenga que ver con el uso regular de aceites comunes como el bálsamo para los labios, el aceite para bebés, el roce del pecho o la vaselina.
Su médico puede ordenar otras pruebas para confirmar el diagnóstico. Las posibles pruebas incluyen:
El tratamiento depende del tipo y la causa de la neumonía lipoidea, así como de la gravedad de los síntomas. Con la neumonía lipoide exógena, eliminar la exposición a la sustancia grasa a menudo es suficiente para mejorar los síntomas.
Su médico podría sugerirle el uso de medicamentos antiinflamatorios recetados, como los corticosteroides, para reducir la inflamación causada por la neumonía lipoide.
Otros tratamientos, como la terapia de oxígeno y la terapia respiratoria, pueden facilitar la respiración para las personas con neumonía lipoide. El lavado de pulmón completo se puede usar para aliviar los síntomas de la neumonía lipoidea causada por la PAP.En este procedimiento, uno de sus pulmones se llena con una solución salina caliente y luego se drena bajo anestesia.
Una vez diagnosticada, la neumonía lipoidea es tratable. Aunque hay pocos estudios a largo plazo sobre la neumonía lipoidea, los estudios de casos sugieren que el pronóstico para la neumonía lipoidea es bueno. El pronóstico también se ve afectado por la salud pulmonar general y otras enfermedades pulmonares crónicas que una persona puede tener.
Con la neumonía lipoidea exógena, eliminar la exposición a la grasa inhalada o aspirada puede ayudar a aliviar los síntomas. La neumonía lipoidea exógena no siempre es prevenible. Sin embargo, ayuda a comprender los riesgos de ingerir aceite mineral e inhalar otras sustancias oleosas.
Si experimenta síntomas de neumonía lipoidea, haga una cita con el médico lo antes posible.