Los fructooligosacáridos (FOS) están compuestos por cadenas cortas de fructosa. Son un tipo de carbohidrato llamado oligosacáridos. FOS se producen naturalmente en muchas plantas, que incluyen:
Los fructooligosacáridos son sutilmente dulces y bajos en calorías. No son digestibles, por lo que no afectan el nivel de azúcar en la sangre. FOS también puede tener múltiples beneficios para la salud.
Los FOS se usan principalmente como un edulcorante alternativo bajo en calorías. Las personas pueden comer y beber productos elaborados con FOS en lugar de aquellos que contienen azúcar, que aumentan los niveles de glucosa en la sangre y causan un aumento de peso. El FOS también puede ser preferible a los edulcorantes artificiales, algunos de los cuales se han relacionado con todo, desde el aumento de peso hasta la diabetes.
FOS se puede encontrar en muchos alimentos. Las concentraciones más altas se encuentran en:
El agave azul está disponible como un néctar que puede diluir en agua y beber. También puedes usar el agave azul en toda su potencia como un jarabe. La raíz de achicoria se usa comúnmente como una bebida sustitutiva sin cafeína para el café.
FOS también están disponibles en forma de polvo como suplementos. También son un ingrediente agregado en los suplementos prebióticos en forma de píldora o cápsula.
El FOS generalmente se incluye en las etiquetas de los alimentos como parte de la fibra dietética, bajo el número total de carbohidratos. Es un ingrediente en algunas marcas de yogurt, barras nutritivas, sodas dietéticas y otros productos, como alimentos para perros y gatos.
También puede haber contras al uso de FOS. Éstos incluyen:
Según un estudio, publicado en Gastroenterology & Hepatology, el FOS puede aumentar los siguientes síntomas en personas con tolerancia limitada a cualquier forma de fructosa:
El FOS también puede tener efectos negativos en las personas con síndrome del intestino irritable (SII) y en las personas con síndrome de sobrecrecimiento bacteriano del intestino delgado (SIBO). Pero, hay investigación limitada y resultados científicos conflictivos en estas áreas.
Los FOS pueden tener beneficios para la salud que brindan valor aparte de su capacidad para endulzar los alimentos.
Debido a que no son digestibles, el FOS viaja intacto a través del intestino delgado al colon (intestino grueso), donde apoya el crecimiento de bacterias saludables en el tracto digestivo.
Como se informó en la enfermedad digestiva y hepática, FOS ayuda a suprimir Clostridium perfringens, una bacteria tóxica asociada a la intoxicación alimentaria. Un estudio en animales publicado en The Journal of Nutrition indicó que el FOS también puede proporcionar cierta protección contra la salmonela, otra enfermedad transmitida por los alimentos.
Una visión general de los estudios en animales indicó que los FOS pueden reducir tanto el peso como los niveles de colesterol en ratas y perros, y que estos hallazgos también pueden ser relevantes para los humanos.
Según una revisión publicada en Veterinary and Human Toxicology, los FOS no están relacionados con el cáncer y no son tóxicos para los humanos o los animales.
Los FOS son una buena fuente de fibra dietética soluble. Según un estudio publicado en la revista Nutrients, se ha demostrado que los FOS reducen o eliminan el estreñimiento.
Los FOS son objeto de múltiples estudios científicos. Actualmente, no hay una dosis diaria recomendada para FOS. Cuando no se utiliza en exceso, FOS puede tener muchos beneficios para la salud. Cuando se usa en exceso, el FOS puede causar problemas gástricos en algunas personas. Todavía se necesita más investigación sobre los beneficios para la salud del FOS, pero los datos actuales parecen apuntar a su seguridad.