Su cuerpo está lleno de colonias de bacterias inofensivas conocidas como microbiota. La mayoría de estas bacterias tienen un efecto positivo en su salud y contribuyen a los procesos naturales de su cuerpo.
Pero cuando una de estas colonias bacterianas está fuera de equilibrio, puede conducir a disbiosis. La disbiosis generalmente ocurre cuando las bacterias en su tracto gastrointestinal (GI), que incluyen su estómago e intestinos, se desequilibran.
Algunos efectos de la disbiosis, como el malestar estomacal, son temporales y leves. En muchos casos, su cuerpo puede corregir el desequilibrio sin tratamiento. Pero si sus síntomas se vuelven más graves, deberá consultar a su médico para obtener un diagnóstico.
Siga leyendo para obtener más información sobre qué puede causar la disbiosis, cómo reconocer sus síntomas y qué puede hacer para tratar y prevenir esta afección.
Cualquier interrupción en el equilibrio de la microbiota puede causar disbiosis.
Cuando ocurre disbiosis en su tracto gastrointestinal, generalmente es el resultado de:
La disbiosis también es común en la piel. Puede ser causado por la exposición a bacterias dañinas o por un crecimiento excesivo de un solo tipo de bacteria.
Por ejemplo, Staphylococcus aureus Las bacterias pueden crecer fuera de control y provocar una infección por estafilococos. Gardnerella vaginalis las bacterias pueden superar a las bacterias saludables en la vagina y causar ardor, picazón y secreción vaginal.
Sus síntomas dependerán de dónde se desarrolle el desequilibrio de bacterias. También pueden variar en función de los tipos de bacterias que están fuera de equilibrio.
Los síntomas comunes incluyen:
Después de revisar su historial médico y evaluar sus síntomas, su médico puede ordenar una o varias de las siguientes pruebas de diagnóstico:
Prueba de ácidos orgánicos: Su médico recogerá una muestra de orina y la enviará a un laboratorio. El técnico de laboratorio analizará ciertos ácidos que las bacterias pueden producir. Si estos niveles de ácido son anormales, puede significar que ciertas bacterias están fuera de equilibrio.
Análisis digestivo integral de las heces (CDSA): Su médico le pedirá que se lleve a casa un equipo especial para obtener una muestra de su excremento. Devolverá esta muestra a su médico para que la analice. El técnico de laboratorio probará la caca para ver qué bacterias, levaduras u hongos están presentes. Los resultados pueden decirle a su médico si hay un desequilibrio o crecimiento excesivo.
Prueba de aliento de hidrógeno: Su médico le pedirá que tome una solución de azúcar y respire en un globo especial. El aire en el globo se puede analizar para detectar gases producidos por bacterias. Demasiado o muy poco de ciertos gases puede indicar un desequilibrio bacteriano. Esta prueba se usa a menudo para detectar el crecimiento excesivo de bacterias del intestino delgado (SIBO).
Su médico también puede tomar una muestra de bacterias o tejido (biopsia) de un área de una infección activa para ver qué bacterias están causando la infección.
Si el medicamento está detrás de su desequilibrio bacteriano, es probable que su médico le recomiende que deje de usarlo hasta que se restablezca el equilibrio bacteriano.
Su médico también puede recetarle medicamentos para ayudar a controlar las bacterias, que incluyen:
Si su dieta está en la raíz de su desequilibrio bacteriano, su médico le ayudará a crear un plan de nutrición.
Esto puede ayudar a asegurar que esté obteniendo suficientes nutrientes para mantener el equilibrio de las bacterias, incluyendo:
Es posible que su médico también le diga que deje de comer ciertos alimentos que contienen sustancias químicas dañinas o demasiados nutrientes.
Los alimentos que puede agregar a su dieta incluyen:
Los alimentos que puede necesitar para dejar de comer incluyen:
Tomar pre y probióticos también puede ayudar a mantener el equilibrio de las bacterias intestinales. Estos suplementos contienen cultivos de bacterias específicas que puede comer, beber o tomar como medicamentos. Hable con su médico sobre los tipos de pre o probióticos que necesitará para mantener su microbiota equilibrada.
Algunas investigaciones muestran que el yoga y la meditación pueden ayudar a su cuerpo a absorber nutrientes.También pueden aumentar el flujo de sangre a su cerebro y volver a su intestino. Esto puede reducir algunos de los síntomas de la disbiosis.
Si no se trata, la disbiosis puede llevar a:
La disbiosis generalmente es leve y se puede tratar con medicamentos y cambios en el estilo de vida. Pero si no se trata, la disbiosis puede conducir a enfermedades crónicas, como el SII o la enfermedad celíaca.
Consulte a su médico de inmediato si experimenta algún dolor de estómago o irritación de la piel inusual o persistente. Cuanto antes su médico diagnostique su afección, menos probabilidades tendrá de desarrollar complicaciones adicionales.
Ciertos cambios en el estilo de vida pueden ayudar a mantener su equilibrio bacteriano y evitar que ocurra un crecimiento excesivo.