La coagulación intravascular diseminada (DIC, por sus siglas en inglés) es una condición rara y potencialmente mortal. En las primeras etapas de la afección, el DIC hace que la sangre se coagule excesivamente. Como resultado, los coágulos de sangre pueden reducir el flujo sanguíneo y bloquear la sangre para que no llegue a los órganos corporales. A medida que la condición avanza, las plaquetas y los factores de coagulación, las sustancias en la sangre responsables de la formación de coágulos, se agotan. Cuando esto suceda, comenzarás a experimentar un sangrado excesivo.
DIC es una condición grave que puede llevar a la muerte. Si tiene un sangrado que no se detiene, vaya a una sala de emergencias o llame al 911 para recibir tratamiento médico de inmediato.
El sangrado, a veces de múltiples ubicaciones en el cuerpo, es uno de los síntomas más comunes de la DIC. Puede ocurrir sangrado del tejido de la mucosa (en la boca y la nariz) y otras áreas externas. Además, el DIC puede causar sangrado interno.
Otros síntomas son:
Si tiene cáncer, la DIC generalmente comienza lentamente, y la coagulación en las venas es más común que el sangrado excesivo.
Cuando las proteínas utilizadas en su proceso normal de coagulación se vuelven demasiado activas, puede causar DIC. Se sabe que la infección, el traumatismo grave (como las lesiones cerebrales o las lesiones por aplastamiento), la inflamación, la cirugía y el cáncer contribuyen a esta afección.
Algunas causas menos comunes de DIC incluyen las siguientes:
También puede desarrollar DIC si entra en shock.
Su riesgo de DIC es elevado si recientemente:
El DIC puede identificarse a través de varias pruebas relacionadas con sus niveles de plaquetas, factores de coagulación y otros componentes sanguíneos. Sin embargo, no hay un procedimiento estándar. Las siguientes son algunas pruebas que se pueden realizar si su médico sospecha de DIC:
El DIC puede causar complicaciones, especialmente cuando no se trata adecuadamente. Las complicaciones pueden ocurrir tanto por la excesiva coagulación que ocurre en las primeras etapas de la enfermedad como por la ausencia de factores de coagulación en las últimas etapas. Las complicaciones incluyen:
El tratamiento con DIC depende de lo que está causando el trastorno. El tratamiento de la causa subyacente es el objetivo principal. Para tratar el problema de la coagulación, se le puede administrar un anticoagulante llamado heparina para reducir y prevenir la coagulación. Sin embargo, es posible que no se administre heparina si tiene una carencia grave de plaquetas o está sangrando demasiado.
Las personas con DIC aguda (repentina) requieren hospitalización, a menudo en una unidad de cuidados intensivos (UCI), donde el tratamiento intentará corregir el problema que causa el DIC mientras se mantiene la función de los órganos.
Es posible que necesite una transfusión para reemplazar las plaquetas que falta. Las transfusiones de plasma tienen la capacidad de reemplazar los factores de coagulación que le faltan.
La perspectiva de su tratamiento depende de la causa de su desarrollo de DIC. Si el problema inicial se puede corregir, entonces DIC se resolverá. Si no es así, su médico puede prescribir anticoagulantes para prevenir los coágulos de sangre.
Las personas que toman anticoagulantes deben ver a sus médicos para chequeos regulares. Su médico querrá realizarle análisis de sangre con regularidad para evaluar cómo se coagula su sangre.