La hipoxia cerebral es cuando el cerebro no recibe suficiente oxígeno. Esto puede ocurrir cuando alguien se está ahogando, asfixiando, asfixiando o en un paro cardíaco. La lesión cerebral, el derrame cerebral y la intoxicación por monóxido de carbono son otras posibles causas de la hipoxia cerebral. La condición puede ser grave porque las células cerebrales necesitan un flujo ininterrumpido de oxígeno para funcionar correctamente.
Hay muchas afecciones médicas y eventos que interrumpen el flujo de oxígeno a su cerebro. Un derrame cerebral, un paro cardíaco y un latido irregular del corazón pueden evitar que el oxígeno y los nutrientes viajen al cerebro.
Otras posibles causas de agotamiento de oxígeno incluyen:
Cualquier persona que experimente un evento en el que no reciba suficiente oxígeno corre el riesgo de sufrir hipoxia cerebral. Si su trabajo o actividades regulares involucran situaciones que lo privan de oxígeno, su riesgo es mayor.
Participar en deportes donde las lesiones en la cabeza son comunes, como el boxeo y el fútbol, también lo pone en riesgo de sufrir hipoxia cerebral. Los nadadores y buceadores que mantienen la respiración durante largos períodos de tiempo también son susceptibles. Los escaladores de montaña también están en riesgo.
Usted está en riesgo si tiene una condición médica que limita la transferencia de oxígeno a su cerebro. Estas condiciones incluyen:
Los síntomas de hipoxia cerebral varían de leves a severos. Los síntomas leves incluyen:
Los síntomas severos incluyen:
Su médico puede diagnosticar la hipoxia cerebral al examinar sus síntomas, actividades recientes e historial médico. Un examen físico y exámenes usualmente son parte del proceso. Las pruebas pueden incluir:
La hipoxia cerebral requiere tratamiento inmediato para restablecer el flujo de oxígeno a su cerebro.
El curso exacto del tratamiento depende de la causa y la gravedad de su afección. Para un caso leve causado por el montañismo, por ejemplo, inmediatamente regresaría a una altitud más baja. En casos más graves, necesita atención de emergencia que lo coloque en un ventilador (máquina de respiración).
Tu corazón puede necesitar apoyo también. Es posible que reciba hemoderivados y posiblemente líquidos a través de un tubo intravenoso.
Buscar tratamiento inmediato reduce las posibilidades de daño cerebral.
También puede recibir medicamentos para problemas de presión arterial o para controlar su ritmo cardíaco. Los medicamentos o anestésicos que frenan las convulsiones también pueden ser parte de su tratamiento.
La recuperación de la hipoxia cerebral depende en gran medida de cuánto tiempo su cerebro haya estado sin oxígeno. Dependiendo de la gravedad de su condición, puede tener problemas de recuperación que eventualmente se resuelven. Los desafíos potenciales incluyen:
Las personas cuyos niveles de oxígeno en el cerebro han estado bajos durante más de 8 horas por lo general tienen un peor pronóstico. Por esta razón, las personas con lesiones graves en la cabeza generalmente son monitoreadas en el hospital inmediatamente después de la lesión para asegurarse de que sus cerebros reciben suficiente oxígeno.
Usted puede prevenir la hipoxia cerebral al monitorear ciertas condiciones de salud. Consulte a un médico si su presión arterial es demasiado baja y mantenga su inhalador cerca todo el tiempo si tiene asma. Evite las altitudes elevadas si es susceptible al mal de altura. Para personas inesperadamente privadas de oxígeno, como durante un incendio, la reanimación cardiopulmonar (RCP) inmediata ayuda a prevenir que la condición empeore.