Las úlceras arteriales y venosas son dos tipos de llagas abiertas que se encuentran en el cuerpo. A menudo se forman en las extremidades inferiores, como las piernas y los pies.
Las úlceras arteriales se desarrollan como resultado del daño a las arterias debido a la falta de flujo de sangre al tejido. Las úlceras venosas se desarrollan a partir de daños en las venas causados por un retorno insuficiente de la sangre al corazón.
A diferencia de otras úlceras, estas heridas en las piernas pueden tardar meses en sanar, si se curan en absoluto. Aunque son similares, requieren diferentes tratamientos para asegurar una curación adecuada y una recuperación rápida.
Los síntomas comunes de formación de úlceras incluyen dolor e hinchazón. Otros síntomas pueden diferir entre las úlceras arteriales y venosas.
Las úlceras arteriales a menudo se forman en la parte externa del tobillo, pies, talones o dedos de los pies. También pueden formarse en otras áreas. Estas úlceras son dolorosas y tienen un? Punzón? apariencia.
Otros síntomas o características de las úlceras arteriales incluyen:
Las úlceras venosas generalmente se forman debajo de la rodilla y en la zona interna del tobillo. A veces hay poca o ninguna molestia, a menos que la úlcera esté infectada. En otros casos, las úlceras venosas pueden ser dolorosas.
La zona afectada también puede ir acompañada de los siguientes síntomas:
La mala circulación sanguínea a menudo causa úlceras. Cuando hay un flujo sanguíneo reducido, la piel y los tejidos en las áreas afectadas están privados de oxígeno y nutrientes. Estas áreas se inflamarán y formarán una herida abierta.
Aunque las úlceras pueden formarse en cualquier parte del cuerpo, las úlceras arteriales y venosas se encuentran más comúnmente en las piernas y los pies.
Las arterias obstruidas son causas comunes de úlceras arteriales. También se les conoce como úlceras isquémicas. Las arterias son responsables de suministrar nutrientes y oxígeno a diferentes tejidos. Las arterias obstruidas impiden que la sangre rica en nutrientes fluya hacia las extremidades. Esto resulta en una herida abierta.
Otras causas potenciales de úlceras arteriales incluyen:
Las úlceras venosas son el tipo más común de úlcera en la pierna. Son causadas por daños en las venas. Las venas son responsables de llevar la sangre de varias partes del cuerpo al corazón a través de válvulas de una vía. Estas válvulas evitan que la sangre fluya lejos del corazón.
Si la sangre no fluye correctamente, podría acumularse en un área del cuerpo. Esto causa daño a la vena y fugas de líquido y células sanguíneas, causando edema o hinchazón. Se piensa que esto previene el flujo adecuado de sangre al tejido en la pierna. Como resultado, este tejido morirá y las úlceras comenzarán a formarse.
Otras causas potenciales de las úlceras venosas incluyen:
Para cualquier tipo de úlcera, busque atención médica de inmediato si sus síntomas empeoran y están acompañados de:
En los casos más graves, estos síntomas pueden ser signos de una infección. Si no se trata, puede ser necesaria la amputación.
Antes de sugerir un tratamiento, su médico debe identificar la causa subyacente. Las úlceras se pueden tratar con antibióticos y cuidados adecuados, pero el diagnóstico de la causa subyacente puede asegurar que las úlceras sanen y no se repitan.
Algunas condiciones que contribuyen a las úlceras incluyen:
Al igual que con cualquier úlcera, el tratamiento primario se centra en aumentar la circulación sanguínea en el área afectada. Los objetivos de tratamiento adicionales incluyen:
Para tratar las úlceras arteriales, su médico intentará restablecer la circulación sanguínea en el área afectada. Tratar la causa subyacente con antibióticos puede ayudar a reducir los síntomas, pero no curará la úlcera por completo. Los médicos pueden usar la cirugía para restablecer el flujo de sangre a los tejidos y órganos, además de los antibióticos.
Existen varias opciones quirúrgicas para tratar las úlceras arteriales, incluida la angioplastia. Este procedimiento utiliza un globo para abrir la arteria afectada para mejorar el flujo sanguíneo. Cuando se restaura el flujo de sangre, sus síntomas desaparecerán.
Si no se puede restablecer el flujo de sangre, o si la herida se ha infectado fuertemente, su médico puede recomendar una amputación.
Las úlceras arteriales deben mantenerse secas, limpias y vendadas para prevenir infecciones y agrandar la herida. Hable con su médico con qué frecuencia necesita cambiar sus vendajes y cualquier recomendación de tratamiento adicional o cambios en el estilo de vida.
Las úlceras venosas pueden tardar meses en curarse. En algunos casos raros, puede que nunca sanen. Al igual que las úlceras arteriales, el tratamiento se enfoca en mejorar el flujo de sangre al área afectada.
Su médico puede recomendar antibióticos para tratar la causa subyacente, prevenir una infección y prevenir las recurrencias. Sin embargo, los antibióticos solos no pueden curar una úlcera venosa.
Su médico le mostrará cómo limpiar y vendar adecuadamente su herida.También pueden recomendar terapia de compresión. Esto implica aplicar un vendaje de compresión o una media al área afectada. Esta presión mejora el flujo sanguíneo y reduce los síntomas.
Su médico puede recetarle analgésicos para reducir su malestar. También pueden animarle a mantener su pierna u otra área afectada elevada.
Las úlceras arteriales y venosas son el resultado del flujo sanguíneo irregular y la circulación. Si no se trata, estas úlceras pueden causar complicaciones graves. Si comienza a experimentar síntomas irregulares o nota dolor en las extremidades inferiores, busque atención médica de inmediato.
No se autodiagnóstico. Su herida o síntomas podrían ser indicadores de una condición más grave. Discuta sus opciones y preocupaciones con su médico para asegurarse de recibir el mejor tratamiento.