El vinagre de sidra de manzana (ACV) se ha convertido en un popular remedio casero para muchas afecciones. Entre sus supuestos usos está la capacidad de disolver o prevenir los cálculos renales.
Gran parte de la evidencia que apoya el uso de ACV para tratar los cálculos renales es anecdótica. Aunque no hay mucha investigación por ahí, la gente todavía la considera como una opción de tratamiento natural prometedora.
Se cree que el uso de ACV sin filtrar, orgánico y sin filtrar produce los mejores resultados. Continúa leyendo para aprender más sobre sus poderes curativos.
Los cálculos renales son masas sólidas de minerales cristalizados y sales que se desarrollan dentro de los riñones y a lo largo del tracto urinario. Los cálculos renales ocurren como resultado de la acumulación de estos minerales en su orina, especialmente cuando su orina está concentrada. Varían en tamaño y suelen ser bastante dolorosas.
Los cálculos renales pueden causar náuseas, fiebre y dolor al orinar. Son bastante comunes, sobre todo si los has tenido antes o si se presentan en tu familia.
Algunas personas recomiendan usar ACV como una forma natural de tratar los cálculos renales. Se cree que el ácido cítrico que se encuentra en el ACV suaviza, descompone y disuelve los cálculos renales. Los cálculos renales pueden reducirse de tamaño para que pueda pasarlos fácilmente a la orina.
Se dice que el ACV alcaliniza la sangre y la orina mientras aumenta los ácidos estomacales. Esto ayuda a prevenir la formación de nuevas piedras y mejora la digestión.
ACV incluso puede ayudar a reducir el dolor y la inflamación de los cálculos renales. Ayuda a liberar al cuerpo de toxinas y minerales en exceso que pueden llevar a cálculos renales. Según algunos, el ACV tiene un efecto de limpieza en el riñón y el hígado.
Gran parte de la evidencia que apoya el uso de ACV en el tratamiento de cálculos renales es anecdótica. Faltan estudios científicos sólidos que examinen el efecto directo del ACV en los cálculos renales. Sin embargo, ACV todavía muestra potencial en el tratamiento de cálculos renales.
Por ejemplo, el ACV contiene trazas de potasio, que se ha demostrado que previene la formación de cálculos renales. La investigación de 2016 encontró que los niveles más altos de ingesta de potasio en la dieta estaban fuertemente asociados con la prevención de cálculos renales.
Sin embargo, es importante que no tome demasiado ACV, ya que esto puede llevar a la pérdida de potasio. Se necesitan investigaciones adicionales que investiguen el efecto directo del potasio en el ACV para prevenir los cálculos renales.
Un estudio de 2017 analizó el efecto de diferentes hábitos dietéticos en los cálculos renales. Se encontró que el vinagre fermentado tiene un efecto positivo en la prevención de las piedras. Se demostró que estaba significativamente relacionado con un menor riesgo de formación de cálculos renales. Se encontró que el té y las legumbres tienen el mismo efecto. Se necesita más investigación para determinar el efecto directo del vinagre en los cálculos renales.
Según un estudio en animales de 2014, el ACV tiene un efecto protector contra las lesiones oxidativas del riñón y aumenta las enzimas antioxidantes. También se demostró que reduce los niveles de colesterol. Esto podría ser útil para prevenir los cálculos renales, ya que un mayor peso corporal está asociado con la formación de cálculos renales. Es más probable que tenga un colesterol más alto si tiene sobrepeso.
Puedes tomar ACV si tienes cálculos renales. También se puede tomar regularmente como medida preventiva.
Siempre beber ACV diluido. El ACV sin diluir puede dañar el esmalte dental y quemar la garganta. Enjuágate bien la boca después de consumirla.
Hay varias opciones para tomar ACV.
La forma más sencilla de tomarlo es agregar 1-2 cucharadas a un vaso de agua. Intenta agregar 1 cucharada de miel cruda si quieres hacerlo más dulce.
Se cree que agregar jugo de limón a ACV puede mejorar sus efectos positivos en la salud. Esto se debe a que el jugo de limón también contiene citrato, lo que ayuda a disminuir aún más los niveles de acidez en la orina. El citrato también puede ayudar a prevenir que se formen nuevas piedras y que las piedras existentes se vuelvan más grandes. Agregue 2 onzas de jugo de limón al agua ACV.
Para lo que se ha llamado un poderoso remedio casero de cálculos renales, combine:
Bebe este brebaje seguido de un vaso de agua.
Otra opción es mezclar 1/2 cucharadita de bicarbonato de sodio y 2 cucharadas de ACV en un vaso de agua tibia o tibia. El bicarbonato de sodio es el ingrediente activo en el bicarbonato de sodio. Puede ayudar a alcalinizar su cuerpo y hacer que su orina sea menos ácida. Se cree que esto ayuda a deshacerse de los cálculos renales y evita que vuelvan.
Puede agregar ACV a sus comidas incluyéndolo como un ingrediente en una gran cantidad de productos caseros, que incluyen:
ACV también está disponible en forma de cápsula o suplemento.
Existen prácticas dietéticas que pueden ayudar a prevenir los cálculos renales. Aquí hay algunas pautas y recomendaciones:
Es importante que cuide su salud si tiene cálculos renales. Programe una cita con su médico si su afección no mejora, o si sus síntomas empeoran o se agravan.
En algunos casos, los cálculos renales requieren tratamiento médico para evitar complicaciones. Solo su médico puede decirle si es seguro tomar un enfoque de esperar y ver sus piedras mientras intenta un remedio casero como ACV.
Como medida preventiva, es una buena idea hacer un punto para mejorar su estilo de vida para mantener una excelente salud. Lleve una dieta saludable, haga ejercicio regularmente y tome medidas para evitar el estrés. Asegúrese de descansar lo suficiente para que tenga suficiente energía para funcionar bien.
Es especialmente importante que se cuide si ha tenido cálculos renales en el pasado o si prevalecen en su familia.